Ero Manga sensei- volumen 1 [ Novela Ligera]

Capitulo 5

Por fin, era 31 de Mayo.

El final del mes - la fecha límite para el manuscrito de Elf y el mío.

Con un paquete marrón cerrado bajo mi axila, me paré delante del Palacio de Cristal. Frente al duelo cercano, el nerviosismo y el miedo comenzaron a darme escalofríos.

No era como si no tuviera confianza. Había elegido un tema difícil - el tema sobre el cual estaba destinado a escribir, un tema sobre el cual escribí con mi máxima motivación. En ese momento, mi corazón estaba lleno de un sentimiento de auto-realización sin precedentes.

Incluso sentía que ese trabajo era asombroso. Pero a pesar de eso, mis piernas estaban temblando.

Estar satisfecho con el trabajo de uno es algo normal. Todos deben sentir lo mimos. Así como todos tratan a su hijo como a un prodigio.

Aunque sentía que lo había hecho bien - por el hecho de no habérselo dado a leer a nadie, no podía estar seguro de si los demás estarían de acuerdo conmigo.

Aún si yo estaba bien con mi trabajo, el lector tal vez no.

Así que, estaba asustado. Muy asustado. Mi estomago se sentía como si estuviera a punto de estallar.

Esa sensación de ansiedad y miedo desaparecería de manera lenta después de que muchos lectores me dieran su opinión positiva. Como 'muy bien' - esos comentarios aumentarían mi confianza.

Después de tres años de mi debut... había escrito un incontable número de palabras; mucha gente las había leído y había dado su opinión. Debido a eso, había logrado obtener la sensación de que 'si escribo así, a las personas les gustara'.

Por suerte, había sido capaz de encontrar lectores que encontraban que mis historias eran buenas.

En el evento de autógrafos hace no mucho - estaba muy feliz. Sus sentimientos me habían conmovido tanto.

Pero esta vez, había escrito algo por completo diferente a todo lo anterior.

Distinto a mi antigua manera de escribir, esta vez lo había hecho pasando por muchos obstáculos.

Y entonces -

En ese momento, aparte de mi mismo, no sabía si habría alguien más a quien iba a gustarle.

Pero seguir pensando en eso era perder el tiempo. Hasta que alguien lo leyera, no sería capaz de asegurarme.

En ese momento, la confianza ganada en tres años no significaba nada. Estaba un poco perdido, inseguro sobre qué hacer.

Igual que respecto al corazón de mi hermana.

Murmure débilmente para mi mismo:

"Ah ~ en verdad, que nostálgico."

No pude evitar recordar... la primera vez que fui a la editorial. La primera vez que escribí una novela, la primera vez que subí una a internet - esa clase de tensión.

- Hasta que 'esa persona' escribió el primer comentario, no fui capaz de dormir.

"... Hah."

Traté de calmarme. Esa persona - era un amigo, o mejor dicho un salvador.

Ya que solo nos comunicamos por internet, no conocí la cara de esa persona, su nombre real o su sexo. Pero por la madurez con la que hablaba, supuse que era un hombre, mayor que yo.

He hablado con él muchas veces sobre la novela que escribí. Charlas sobre que escena era la mejor, que personajes nos gustaban - cosas así. A menudo hablábamos de cosas inútiles y al azar como esas por horas.