"El moretón"

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Ambiente:
Harry; 2 años
Casa de los Potter.

~*~

-James, ninguna locura mientras no este en casa - Hablo tomando su bolso.

-Tranquila Lils, además ¿Cuando he echo alguna locura? - Lily levantó sus cejas - Está bien, puede que alguna vez, pero eran insignificantes - Ella sonrió y puso en blanco los ojos.

-Mi pequeño Harry, te quedas con papá - James los miró con ternura - El esta loquito, pero no dejará que te pase nada - Habló Lily con dulzura, James borro su sonrisa.

-¡Yo no estoy loco! - Protestó el azabache y Lily rió.

-Si lo estás - Beso sus labios haciendo que este callara y sonriera, para luego mirarla seriamente - Y si pasa algo no salgas corriendo a pedirle ayuda a Sirius, llámame a mi.

-Obvio, pero no pasara nada mientras yo esté aquí - Inflo el pecho con orgullo.

-Oh cierto, se me olvido que estoy casada con James PuedoConTodo Potter - Burlo la pelirroja y James bufo - Los amo.

-Nosotros a ti - Dijo James mientras Lily cerraba la puerta - Okey... ya se fue - Verificó por la ventana - ¡Bien Harry! ¿Listo para divertirte con papi? - Dio un brinquito emocionado haciendo que el pequeño Harry riera.

30 minutos Después...

-¿¡QUE PASA JAMES?! ¿¡SE ABRIÓ LA CABEZA?! ¿¡SE FRACTURO ALGO?! - Apareció Sirius mirando desesperado por todos lados - ¡No sé que está pasando pero ya avise a Lupin! ¡El es mejor en esto! - James bajo las escaleras corriendo.

-¡Sirius! - Se le abalanzó James con tono desesperado.

-¿QUE LE PASÓ? - Gritó el pelinegro angustiado.

-¡SE PEGO CON LA ESCALERA! - Sollozo el azabache - ¡Y TIENE UN MORETÓN EN LA FRENTE!

-¡AYYYY MERLIN! - Se llevó las manos a la cabeza en señal de preocupación - ¡YA VOY MINI- CORNAMENTA! - Fue lo único que grito antes de salir corriendo escaleras arriba.

Ya en la parte de arriba de la casa, se encontraban Sirius y James, con él pequeño Harry que no dejaba de llorar, el cual tenía un trapo más grande que el sobre toda la cabeza con agua caliente, eso porque según su padrino, le quitaría la fiebre, por otro lado estaba untado de pies a cabeza de una crema de un olor detestable, esto se lo había colocado su padre diciendo que le quitaría el dolor, pero ninguno de los dos adultos presentes se había tomado la molestia de ver que el frasco de la crema decía "Crema para picazón extrema".

-¡Ya no sé qué hacer, Sirius! - Desespero James al ver que Harry no dejaba de llorar.

-¿James? ¿Sirius? - Se escucho una voz abajo.

-¡Lily! ¡Te prometo que más nunca pasara! ¡No me golpees! - Lloriqueo James arrodillándose con los ojos cerrándose.

-Wow James, se ve que Lily te tiene bien controlado - Hablo una voz entrando al cuarto que hizo que James abriera los ojos de golpe - Por cierto, también me da gusto verlos.

-¡Remus!/¡Lunático! - Se abalanzaron sobre el.

-¿Que fue tan grave para que Sirius me enviara una lechuza con una letra un tanto más fea de lo normal? - Preguntó y ambos se miraron angustiados - ¿Y que le pasa a Harry que no para de llorar?

-¡Remus! - Se agarro de su pecho James - ¡Se golpeó la cabeza! ¡Y no sé que hacer!

-¿¡Que?! - Preocupado se acercó a la cuna de Harry el cual entre el trapo gigante y la crema amarillenta solo se reconocía por su llanto - ¿Por que le pusieron todo esto? - Lupin quito el trapo y revisó la frente de Harry, bufó y miró a su amigos con fastidio.

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