Capítulo XVI Mi verdadero motivo

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"Duele"

Kuro movía su boca sobre la suya de una forma lenta, tortuosa... casi con dolor y los ojos cerrados. Y él no lograba comprender del todo cómo es que terminaron acostados en el sillón del cuarto de Sakuya devorándose los labios.

De lo único que era consciente es que él estaba en su pleno uso de razón correspondiéndole, y aferrándose desesperadamente mientras se entrega por completo. Del ambiente a su alrededor no tenía idea, pero el beso se sentía extraño...

"Es un dolor distinto a una herida en la piel."  Shirota pensó.

La forma en que lo hacían. Es como si sonara a una especie de despedida.

Mahiru entrecerró los ojos. Hasta el momento no había querido pensarlo, pero tan pronto lo hizo se sintió ahogar en un gemido por el dolor en su pecho. Abrió su boca, y lentamente quiso separarse, pero Kuro fue necio y reafirmo el agarre en sus cabellos, y volvió a besarlo lamiendo su labio inferior y volver a jugar en su interior.

Shirota se rindió. Acarició los cabellos ajenos, buscado en ese mimo el consuelo que parece buscar el chico sobre él. Porque era cariñoso; un suave y un dócil beso que quiere sacarle un sollozo. 

Hasta que Ash abre los ojos y él jadea.

Hay temor y dudas. Los ojos turquesa de Kuro parecían reflejar más que esas emociones, y sin embargo, después de una desconcertante lentitud, ambos dan el ultimo roce y dan por terminado ese pequeño y suavizante beso.

Son solo unos segundos en donde se miran a los ojos, antes que Kuro quiera esconder el rostro en su cuello.

— Siento lo que hice, pero lo necesitaba — Mahiru escucha el susurro dolido en su oído, y le es inevitable el no sacar una pequeña sonrisa.

— Supongo que ya no es la primera vez que nos besamos, ¿cierto, Kuro?

Ya no sabía si realmente sentirse arrepentido o dichoso. Ash sabía que besarlo fue un error, estaba atando a Mahiru de alguna forma. Pero ya no tiene caso lamentarse, sólo fue un beso. Aquello no debería de significar mucho... ¿o sí?

— En la mañana me preguntaste si tu cercanía me hacía sentir algo, Kuro — Ash giró el rostro con algo de temor por lo que diría Mahiru. Y una leve sorpresa se llevó al verlo tan ruborizado y sin ninguna mueca de asco o enfado — La verdad es que si siento cosas contigo.

— ¿Qué dices?

— Siento dolor ahora mismo — Shirota dejó de acariciar los cabellos de Ash, para posar una de sus manos en su pecho. Comenzaba a comprender aquello que Kuro le hacía florecer en su interior— Me sentí extraño con este beso. Me alegró... y al mismo tiempo, también lo odie.

Kuro frunció el ceño por el breve momento de rechazo que sintió, pero Mahiru ladeó el rostro sonriéndole aun avergonzado. Y aquello le hizo quedarse en su misma posición sobre su cuerpo.

— ¿Por qué dolor?

— ¿Tú no te sentiste igual?— un ligero gestó en los ojos turquesa le respondió a Shirota— No sé cómo decirlo, pero... fue como si me besaras para despedirte, Kuro.

Cuando se sintió acorralado, Kuro se levantó y dejó de aprisionar su cuerpo. Le negó la mirada cuando Shirota se sentó a su lado calmadamente pero con una pequeña sonrisa.

— Ya te dije que solo fue un arrebato.

— ¿Realmente no querías besarme, Kuro?

¿En qué momento se invirtieron los papeles? ¿Por qué era Mahiru quién lo arrinconaba hacia preguntas que no quiere darse el lujo de pensar? Si lo besó fue porque le dieron las ganas, nada mas...

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