Eso que nunca te enviaré, amor

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Amor hace tiempo que no te veo, hace tiempo que no te llamo, hace tiempo que no te escribo, hasta hoy.
He decidido escribirte ese tipo de cartas que no tiene ninguna finalidad y las cuales no sabes si enviarlas o no, aquellas que paras a cada segundo para secarte las lágrimas, sí de esas amor, de esas... He tenido tanto tiempo para pensar qué escribirte, que cada vez se me pisan más las palabras y no puedo ordenarlas de manera coherente. Tengo tanto que decirte, que sentirte, que transmitirte, que no tengo ni la más mínima idea de cómo expresarlo.
Joder, has hecho todo tan correcto y a la vez tan mal, que no sé si darte las gracias o pegarte. Recuerdo esos momentos de indiferencia, de orgullo, de esos de si no lo haces tú, yo tampoco y al final siempre acabo yo haciéndolo. Has arreglado mis días de mierda, me has besado las cicatrices en la cama de noche, a la oscuridad, en tus tristezas, en las mías, en las peleas de las tarde, de sofá, hemos pasado esas tardes de piel contra piel, esas noches de películas encerradas en besos y bailes, de ataques de sinceridad, de llantos y abrazos...
Serás tú y esa manera tan rara, tan peculiar que tienes de quererme, que haces volverme loca y piense en ti una y otra vez...
Maldito destino, vaya mierda, cuándo estaba apunto de olvidarlo todo, de asumir que la distancia no son sólo números si no algo más, algo que nos aleja más poco a poco, vuelves y me envías un "hola, qué es de ti, te he echado de menos amor", y una vez más caigo, caigo en esas redes que me atraparon por primera vez, en esas que cuesta tanto salir. ¿Qué estúpido es todo verdad?, qué estúpido suena hora decirte amor después de tanto tiempo, tan estúpido que no puedo dejar de decírtelo.
Amor, amor, amor...
Y a cada amor me acuerdo más de ti, de esa cara de estúpido que me ponías, de esos no me mires que te decía, porque amor, nunca te lo dije, pero cuándo me mirabas tenías cara de niño pequeño cuándo ve a su princesa por primera vez y... ¡Dios mío, me enamoraba! no sabes cuánto.
Y por ello perdón, te pido perdón porque te engañé cuándo te dije que en aquellos momentos de mi vida no era totalmente feliz, pero no sabes cuanta felicidad abarcaba mi cuerpo, tanta que me reía a carcajadas cuando decías esas estupideces que tú y yo sabíamos que no tenían gracia.

Después de tanto aquí estoy yo, esperando volverte a ver una vez más, deseando volver a juntar mi piel con tu piel, mis labios contra tus labios, volver a sentir esas palpitaciones tan tan tan tan infinitamente fuertes...

Y ahora bien. ¿qué hago? ¿qué decido?
¿Te la envío y espero una respuesta que posiblemente no llegue? o ¿la dejo en el cajón de todas aquellas cartas inexistentes que decidí escribirte pero que no lo hice?
¿Dejo el capítulo de nuestra historia de amor con esos puntos suspensivos que tanto duelen?
Te escribiré otra carta más, lo sé. Por que, ay mi amor, si tú supieras que...

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⏰ Última actualización: Sep 24, 2017 ⏰

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