Aprendiendo a Amar

La vida nos hace llorar, hace que nos sintamos miserables por no pertenecer a los estereotipos de una sociedad, nos hace sufrir y gritar por no encajar en los estándares para pertenecer a cierto grupo de persona, nos hace dudar de quienes somos.

Las personas con complejo de perfección hacen que nos paremos frente a un espejo y nos preguntemos ¿soy lo suficiente bonita? Un 99% de chicas con baja autoestima cuando ven pasar a una chica con un vestido muy ajustado a su figura; se cuestiona si ella lleva la ropa adecuada o se siente mal, por no sentirse bonita con ella misma.

Cuando deberían notar que la mayoría de personas solo buscan lo superficial.

Muchas chicas no se dan cuenta lo especial que son. La mayoría de ellas, nunca han escuchado la palabra bonita salir de los labios de el chico que les gusta; cuando deberían escucharlo de la persona que las creo. Él que las dibujo como pinturas para poder admirar la maravillosa obra de arte creada por sus propias manos; porque para él son preciosas, porque las creo para sus ojos, no para las personas de esta tierra.

Para ser bonita no se necesita ropa, joyas o zapatos, lo único que necesitas es amarse como Dios lo hace, valorarse, cuidarse y amar a Dios para sentirse satisfechas con uno mismo.

Recuerda que eres bonita, como una princesa, llena del resplandor del rocío de la mañana, tan bonita como una flor; empieza a valorarte como Dios lo hace.

No lo olvides.