Capítulo 1: ¡El nuevo inicio!

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  Fragmentos de recuerdos vagan por mi mente, pero ninguno es fijo, la mayoría de mi vida solo es eso recuerdos huecos que están esparcidos por mi mente.

Por más gente al alrededor de mi... me siento sola, la confianza que tenía con el tiempo se perdió, mi esperanza en las personas murió desde que conocí a esa persona, la única esperanza es mi Diosa Feno-sama, ella es mi confidente y ha estado a mi lado en los momentos difíciles.

Una diosa que se apiado de su primera creación, dándole un puesto importante como su Gran sacerdotisa, ayudante y consejera de esta.

Desde que perdí la memoria ella fue una de las personas que me estaba ayudando a recordar mi pasado, recuerdos vienen, recuerdos van, no importa mientras pueda protegerla y serle de ayuda, Lo único importante, es Feno-sama, ella me asigno un nombre es ... Elizabeth... después de un tiempo mediante sellados, Feno-sama me dio la mitad de su alma, me explico que sería un ''ángel diferente'', que no me sintiera mal si conocía alguien más fuerte que yo, mi deber es protegerla y en caso de que algo malo llegar a pasarle, la mitad de su alma que me otorgo seria devuelta a esta.

*Mientras tanto en el Palacio principal de Feno-sama*

Feno-sama se encuentra jugando ajedrez dimensional con uno de mis aprendices Vio-san.

-Vamos has el movimiento, me estoy aburriendo.-Decía Feno-sama realmente molesta mientras lo mira fijamente.

-Mmm... si muevo este planeta contra la tierra... está bien hare ese movimiento.-Decía Vio-san algo nervioso mientras movía el planeta, solo para ver la cara de enfado en Feno-sama.

-Perdiste de nuevo.-Decía enojada mientras pataleaba en su asiento.

-Lo siento Feno-sama soy realmente malo en este juego.-Se disculpó rápidamente mientras bajaba la cabeza.

-Quiero macarrones.-Decía Feno-sama molesta mientras hacia una rabieta aventando la tabla de ajedrez lejos.

-Tranquila Feno-sama, eh traído macarrones de varios sabores, por favor deje de hacer berrinché.-Decía en un tono algo serio mientras hacía aparecer una mesa enfrente de esta y acomodaba los platos con macarrones.

-Estoy aburrida, Vio-san es aburrido, no me gusta.-Decía algo molesta mientras tomaba un macarrón y lo comía rápidamente.

-Retírate Vio-san más tarde hablare contigo, debo hablar de algo con Feno-sama.-Dije en un tono serio mientras lo miraba fríamente, este entendió de inmediato, hizo una referencia y se retiró.

-¿De qué quieres hablar?-Pregunto algo seria mientras seguía comiendo.

-Feno-sama, ya ha pasado un tiempo y quería saber si me dejaría ir a verla.-Dije en un tono serio mientras la miraba fijamente, esta dejo de comer de inmediato para verme de manera seria.

-No lo sé, la última vez casi matas a Daishinkan.-Dijo en un tono serio mientras hacia los macarrones a un lado.

-Pero voy ver a mi hija, no a Daishinkan.-Dije algo cansada por culpa de él, no pude ver a mi pequeña durante años.

-Pero sabes cómo son las cosas, si vamos al Multiuniverso 2, tenemos que llegar obligatoriamente con Zeno y sabes que odio a ese tonto, aunque... últimamente me da algo de curiosidad que estará haciendo, tiene mucho tiempo sin venir a molestar sobre jugar y esas tonterías.-Decía algo curiosa mientras miraba su DiosPad.

-Además... usted dijo que estaba aburrida, ¿No sería una gran oportunidad para entretenerse?-Pregunte en un tono medio-sarcástico mientras sonriera de lado.

-Esta bien, me convenciste, iremos... sin embargo tienes que jurar que no atacaras de ninguna forma a Daishinkan.-Decía de manera seria mientras se cruzaba de manos.

Pasos de la vida, El origen de Todo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora