Pasos de la vida, El origen de Todo.

Capítulo 6: ¡Verdad Ficticia, Parte 2!

Estoy completamente en shock, no puedo creer lo que ha hecho Daishinkan en mi contra... realmente él es un...

-Madre, antes de que reacciones enfadada... quiero disculparme por no ser lo suficientemente valiente y a haberte ayudado cuando te la arrebataron, estaba tan asustado que no podía moverme y ante las amenazas de mi padre, yo...-Decía realmente asustado mientras miraba hacia el suelo.

-No fue tu culpa... ahora responde una pregunta más.-Dije de manera seria mientras apretaba mis puños.

-¿C-cuál?-Preguntaba realmente asustado mientras se ponía de pie y se alejaba un poco.

-¿Es verdad que hoy hay una junta en el palacio de Zeno-sama?-Pregunte algo seria mientras me ponía de pie.

-S-si...-Antes de que pudiese protestar por la pregunta cree un portal directo al palacio de Zeno-sama.

-Nos vemos.-Dije en un tono frio mientras entraba a este.

*Palacio de Zeno-sama*

La mayoría de dioses estaban presentes, principalmente los de bajo nivel a excepción de Bills (Pidió permiso para faltar a esta).

-Como les comunico dioses, dentro de poco se llevara a cabo un torneo de poder, sugerido por Son Goku-san y aprobado por Zeno-sama.-Decía algo serio Daishinkan mientras sonreía fríamente.

-¿Qué clase de Torneo será exactamente Daishinkan.-sama?-Preguntaba algo nervioso el Kaio Shin del universo 9.

-Bueno este será de...-Antes de que pudiera seguir hablando fue golpeado fuertemente en el rostro mandándolo a volar atreves de las paredes del palacio, saliendo hacia el exterior.

-Pero que...-Decían realmente nervioso los dioses mientras se ponían de pie y en posición de combate.

-¿Qué sucede?-Preguntaba molesto Zeno-sama el cual cabe decir que estaba durmiendo y fue despertado por el derrumbe de las paredes.

-Daishinkan...-Decía casi en un susurro mientras volaba lentamente hacia donde estaba.

-*Tos* ¿Qué crees que haces, Elizabeth-san?-Preguntaba algo desorientado mientras limpiaba la sangre que salía de su nariz y boca, después de todo él no es el más fuerte.

-¡Shine!-Grite furioso mientras me preparaba para golpearlo de nuevo pero este esquivo, el suelo se partió en mil pedazos.

-¿Qué te sucede?-Preguntaba realmente molesto mientras se ponía en posición de combate.

-Mentiroso.-Dije realmente furioso mientras empezaba a atacar de frente, los ángeles y dioses solo miraban aterrados la escena.

-¿M-mentiroso?-Preguntaba algo desorientado mientras seguía recibiendo golpes continuos, además de que estoy aumentando mi velocidad y le cuesta más esquivarlos.

-¡Shine!-Grite molesta mientras golpeaba desde arriba el suelo se estaba partiendo y el quedo casi arrodillado ante mí.

-¡Padre!-Gritaban realmente aterrados los ángeles, posiblemente porque nunca antes habían visto que alguien le pateara el trasero a su padre.

-Yo... no sé qué hice... pero... lo siento.-Decía cansado mientras seguía bloqueando los ataques.

-Lo digo de nuevo... ¡Mentiroso!-Grite de manera fría mientras, al fin lograba darle golpes directos en las costillas, en el rostro incluso en el estómago, creo que escuche algo romperse, De alguna manera el termino en el suelo, le cuesta respirar, además de estar completamente aterrado por mi actitud, es justo como hace siento de iones, cunado casi lograba matarlo, realmente se está repitiendo la historia, iba a darle otra tunda de golpes pero cierta ángel se atravesó en estos, tuve que detenerme justo cuando mi puño estaba cerca de su cara.

-Detente... por favor.-Suplicaba realmente asustada, no dejaba de temblar, pero aun así estaba de pie frente al para protegerlo.

-Tu voz...-Decía realmente desorientada mientas bajaba mi puño, realmente no estaba siendo razonable.

-¿Mi voz?-Preguntaba algo desorientada mientras volteaba a ver a su padre, el cual muy apenas puede moverse.

-Quiero una explicación y la quiero ahora.-Decía molesto Zeno-sama el cual nos miraba furioso desde el agujero del plació.

*Una reparación y una disculpa más tarde*

-¿Puedo saber por lo menos porque me atacaste?-Preguntaba realmente adolorido Daishinkan mientras era curado por Marcarita y Kusu.

-Mentiste de nuevo, Daishikan.-Dije molesta mientras me cruzaba de manos y lo miraba furiosa.

-Yo no te eh mentido...-Antes de que pudiera decir alguna excusa recibió una fuerte cachetada de mi parte, ante la mirada aterrada de los dioses y ángeles.

-Sabes que odio las mentiras.-Dije con voz fuerte y molesta mientras lo miraba de manea amenazante.

-Podrías dejar de golpearme y decirme que hice.-Decía algo irritado mientras tocaba su mejilla.

-Se lo que le contaste a Angela.-Dije de manera fría mientras lo miraba fijamente, este se paralizo en ese instante.

-Fue una... mentira... bueno... me lo merecía.-Decía nervioso y algo preocupado por las miradas de sus hijos.

-No te comprendo Daishinkan, en el pasado te dije que nuestros problemas se quedaban simplemente entre nosotros 2 y que no debías involucrar a nuestra única hija.-Dije de manera seca mientras lo miraba realmente mal.

-Lo se... pero en esas épocas yo estaba...-Decía algo nervios mientras miraba de reojo a Angela.

-Me importa un carajo como hayas estado en esas épocas, lo único que quiero decir es que hay un límite y has arrevesado demasiado este, desde ahora no quiero que me hablas a menos de que sea algo relacionado con el trabajo o con mi hija, no quiero que te me acerques a más de 5 metros de distancia y sobre todo no quiero que me celes ya que nuestra relación se terminó.-Dije en un tono realmente frio y con una mirada furiosa, todos parecían aterrados, principalmente el.

-Pero...

-¿A quedado claro?-Pregunte molesta, este solo asistió realmente asustado.