10 Deseos para Adam

Capitulo 17

—Entonces, aquí voy

—Adelante

—Bien, pues nací el 19 de junio. No sé quiénes son mis padres biológicos y no me interesa saberlo, si me dejaron fue por algo, pase, según lo que me dijeron 5 años en un orfanato. Hasta que una pareja me adoptó, los dos son actuarios la verdad me han tratado como su hijo desde que llegué

—¿Entonces recuerdas el orfanato?

—No, la verdad no

—Entonces, ¿cómo sabes que eres adoptado? ¿Tus padres te lo dijeron?

—Eh no era muy necesario, es que mis padres son algo peculiares

—¿Peculiares?

—Son literalmente padres... Mmh ósea, son un matrimonio gay

—Ahh... Ya lo entiendo

—Si, solo que a uno de ellos le gusta que le llame mamá. El siempre quiso tener un hijo y que le llamara así.

—¡Oh qué bonito!

—Si, aah después comenzó a crecer y entre a la preparatoria. Ahí es donde el caos se desató, no yo. Yo era poco rebelde lo normal, si no las demás...yo no me había dado cuenta de lo que mis padres biológicos me otorgaron hasta esos años

—Tu...ósea, todo tu

—Si, todo yo

Dijo eso señalando todas su cuerpo entero.

—Y gracias eso la mayoría de las veces me odio, todos piensan que ser lindo te hace más fácil la vida, pero no, la hace más difícil. La mayoría del tiempo que tengo libre en la escuela me la pasaba rechazando niñas que eran muy simpáticas pero, solo me quiera por lo de fuera otras era muy... como decirlo

—¿Perras?

—Si, y lo mismo, me quería por lo de afuera o solamente me tenía que esconder, ya que la mayoría del tiempo tenía un monto de acosadoras

—Y ¿por qué ya no?

—Por qué todas creen que eres mi novia

—Cierto... Bueno, por lo menos ayude en algo

—Si, por cierto ¿cuando comenzaste a pintarte el cabello y hacerte perforaciones?

—Eh casi empezando la universidad...

—Wow, yo solo me atreví a perforarme una vez y fue gracias a una apuesta

—¡¿En donde?!

—En la esquina derecha de mi labio inferior

—¡¡Wow, ya quiero verte con la perforación puesta!!

—Bien mañana me la pongo, pero tú tienes que ponerte todas las tuyas

—¿Como que todas?

—Digo... Osea... Que me imagino que tienes más

—Eh si, solo pongo la de la nariz y la de las orejas

—¿Y por qué no las demás?

—Por qué...espera ¿Como sabes que tengo más?

—Por... Por... Que... ¡¡Note los agujeros hace un rato!!

—Aaah claro...por qué me veo como bandolera

-Jajajaja, por favor póntelos mañana

—Solo para que los veas, no los voy a llevar a la escuela

—Jajaja bien bien

Poco a poco sentía como mis ojos se cerraban por el cansancio

—¿Bella?

Fue lo último que escuche antes de quedarme profundamente dormida.