capítulo 8 : Fireworks

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Siento si hay alguna falta o mala puntuación, en este capítulo también hay canción, lo recomiendo.

Despues del pequeño "incidente" Baltasar se fue dejando caer un <no pienso aguantar esto,, nos vemos Cass> y desapareció de golpe, solo las gotas de sangre encima de Castiel, el casquillo en el suelo y el humo que seguía saliendo de la pistola daban fe de que el ángel alguna vez estuvo en la habitación.

-Sam limpia este desastre, voy a por vendas- dijo Dean mientras se daba la vuelta y se enfundaba la pistola - Dean, ya lo hemos comprado - le recordó Sam en un intento de que no saliera, ya estaba bastante tenso su hermano como para dejarlo irse sin vigilancia - Pues no son suficientes- espetó casi en un gritó de rabia, tenía que despejarse, Dean se sentía como ese mono de feria al que tienen dando vueltas y vueltas sin acabar nunca, -Mira Sam, necesito salir y despejarme un poco - miro a su hermano a los ojos - Te juro que vuelvo en cinco minutos- - Vale, está bien solo cinco minutos, y como no estés de vuelta iré a buscarte aunque tenga que llevar a Castie - no le dió tiempo al terminar el nombre, Sam se había girado hacia el lugar donde sen encontraba Cass para dar énfasis en la frase pero no estaba, en algún momento de la conversación se había escabullido sin que se dieran cuenta.

- Que..., no está - fue lo único que pudo decir Sam en su sorpresa - Joder! - Soltó Dean mientras salía corriendo por el pasillo - Con las heridas no habrá llegado muy lejos! - oyó Sam a su hermano gritando desde el pasillo, el Winchester no podía estar más en lo cierto, de echo Castiel solo pudo llegar hasta la biblioteca antes de que Dean lo interceptara .
- Adonde coño creés que vas!! - Dean gritó golpeando la mesa en el proceso, el golpe fue tan fuerte que resonó por todo el lugar -No espera, creo que ya lo sé, ha morir en la calle como un puto perro callejer- - Me voy - dijo Castiel con voz firme, mirando a las escaleras, dando la espalda a Dean - Sabes que, te dejaremos ir- -Dean, no estás pensando bien, Castiel no podemos esperar hasta mañana y hablarlo más tranquilos - intento vano de Sam por relajar el ambiente, sin efecto alguno, Sam estaba nervioso y tenso al mismo tiempo, todos estaban tensos y su hermano estaba a punto de saltar, saltar y arrasar con todo, el menor de los Winchester tenía miedo de que Castiel no lo aguantaría, no después de lo ocurrido, todavía estaba muy reciente, pero no pudo evitar ser un espectador de primera fila en ver como el poco control que tenía se le escapaba de las manos.
Y Dean explotó, literalmente Sam nunca lo había visto tan cabreado, no paraba de gritar incluso a él le daba miedo acercase a su hermano en esos momentos, Dean era una tormenta y justo en medio estaba Castiel, Sam era el ojo de la misma ajeno, siempre a salvo. Dean gritaba y gritaba para después golpear con los puños ensangrentados como un loco la mesa provocando ruido que parecían truenos o fuegos artificiales cuando explotan y en todo ese éxtasis Dean no se dió cuenta, pero Sam sí, Castiel estaba temblando, con cada golpe de encogía...estaba teniendo un ataque de pánico y fue entonces cuando Sam recordó que Cass ya no era un ángel ahora era un humano, frágil y débil con sentimientos, con miedo.
Sam llamó a Dean una, dos, tres veces, perdió la cuenta.
-Me cago en la puta!! Que coño quieres Samuel!!- Gritó mientras se daba la vuelta para mirar a los ojos a Sam pero este no le devolvió la mirada, sus ojos se dirigía a otra persona que se encontraba detrás de él y no lo entendió en ese momento hasta que escuchó un pequeño lo siento detrás de él y se dió la vuelta, ojalá no lo hubiera hecho, se encontró con un Castiel temblando, apunto de desmoronarse, con las manos tapándose las orejas intentando vanamente tranquilizarse a si mismo sin resultado, cuando por fin reaccionó Sam ya le había tomado la delantera, se dirigió a Cass justo en el momento oportuno en el que las piernas temblorosas de Castiel le habían fallado.
Sam lo sujetó en un fuerte abrazo, uno de sus brazos sujetándolo por la cadera y con su otra mano la base de la cabeza dejando la cabeza de Cass entre su cuello.
-Tranquilo, estoy aquí, soy Sam- repetía una y otra vez intento tranquilizar, sin resultado -Dean, está teniendo un ataque de pánico, no quiero que entre en shock, no sería bueno- trató de explicar a su hermano que tenía la cara desencajada - voy a llevarlo a mi habitación - dijo con decisión en su voz, Cass empezó a a hiperventilar, Sam con rapidez pasó sus manos por el exterior de los muslos de Castiel agarrando con fuerza y alzandolo hacía arriba manteniendo el agarre - Cass necesito que me eches un cable - dijo en un tono suave, solo tenía a Cass agarrado por los muslos pero el nombrado tenía que sujetarse a la espalda de Sam si no querría caerse contra el suelo, viendo que no iba a reaccionar pasó el brazo derecho por debajo haciendo una especie de silla mientras con la otra colocaba los brazos lánguidos de Castiel en su espalda, cuando ya tenía afianzada la posición esperó unos minutos para asegurarse y se dirigió a su habitación dejando a Dean solo en la biblioteca.

-Tranquilo, estoy aquí, soy Sam-  repetía una  y otra vez intento tranquilizar, sin resultado -Dean, está teniendo un ataque de pánico, no quiero que entre en shock, no sería bueno- trató de explicar a su hermano que tenía la cara desencajada - vo...

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Si ya se sentía mal, esto había acabado con el, no se le pasa ni por un segundo que fuera a reaccionar de esa manera.
Miró sus manos, la sangre de sus nudillos ya estaba reseca, cogió una botella de whisky que estaba cerca echó un chorro por las manos y de manera tosca enrollo un trapo al rededor de ellas todavía indeciso si seguir a Sam o no al final decidió ir, talvez necesitaba su ayuda y dió en lo cierto, Sam estaba teniendo problemas para abrir la puerta de su habitación, Dean veía desde lejos como su hermano intentaba alargar el brazo para abrir la puerta, pero Castiel pesaba demasiado y a los segundos tenía que devolver el brazo a su posición anterior, gruñendo por la frustración.
Dean se acercó y abrió la puerta dejando pasar a su hermano - Gracias- dedicándole una pequeña sonrisa ladeada, mirandole a los ojos
Dean no se atrevió a entrar, se quedó recostado en el marco de la puerta observando a su hermano.
Sam con con cuidado apoyó su rodilla en el borde de la cama, cambió los brazos de posición otra vez colocando una al rededor de la espalda baja y la mano sujetando la cabeza de Castiel, empezó a inclinarse lentamente hasta que Cass estuviese recostado en la cama posicionado entre sus piernas, lo único que quedaba era que Castiel lo liberase del agarre férreo que tenía a su camiseta de franela, Sam lo intentó varías veces pero nada parecía cambiar, de echo todo lo contrario con más insistencia se sentaba a su camisa -Quieres que te eche una mano - preguntó Dean desde el marco de la puerta -No pasa nada, me quedaré un rato, puedes irte si quieres - y Sam puso mucho énfasis en la última parte - Saldré un rato - le contestó - No hagas ninguna estupidez- -Creo que llegas un poco tarde -Dean estuvo mirando como su hermano buscaba un huequecito para tumbarse con Castiel, que todavía lo sujetaba con insistencia, al perecer Sam finalmente lo encontró, la cama era demasiado estrecha y el constante agarre no le dió más remedio que estar más cerca de lo que le gustaría de Castiel, que seguía en su ataque Sam lo acercó más hacía sí en un abrazo, tan cerca que sus alientos podían llegar a mezclarse, Cass pareció relajarse un poco.
Dean veía la escena a lo lejos, sintiéndose inquieto por la cercanía y el afecto detrás de cada acción como una pequeña parte de él se removía diciéndole que era él el que debía estar ahí con Cass, incluso cuando fue el el que lo llevó a ese estado.

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