Eta wueada sigue

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Cada día, los golpes e insultos eran más frecuentes y mis heridas tardaban más en curar.

Seguía pensando en que volvería a ver a ese chico y no fue asi. Para mi el había desaparecido.

*En el salón*

Estaba viendo por la ventana, veía como el viento hacia que las hojas de los árboles calleran. Para mi era hermoso ver como todas esas hojas hacían una ola.

Las clases se me hacían muy cortas, aburridas, porque mis calificaciones eran las mismas. Siempre decía "Aprobada", "Extraordinario", "Felicidades".

Y como todo tiene límites, los papeles que estaban pegados en mi pupitre se comenzaban a desprender, me decidí a quitarlos, uno por uno.

Tome una bolsa y me puse a quitarlos, pero mientras los quitaba me ponía a leer todo lo que decían. Había uno en especial que decía:

Te gustaría ser mi amiga?

No sabía de quién era y no me importaba saber quién lo había escrito, pero, decidí guardarlo.

*Terminaron las clases*

Cuando por fin terminaron las clases, volví a hacer lo que ya era de costumbre...

Ver por la ventana a que todos se fueran.

Y cuando todos se fueron, tome mi bolso, bajaba lo más lento posible, porque no queria llegar temprano a mi casa. Revise hacia los lados para ver si esos chicos me estaban esperando y por suerte no había nadie.

*Toma su bicicleta*

Esta vez no fui directo a mi casa, me di el tiempo de recorrer un parque que estaba cerca, pase por un puente.
Cerca de ese puente habían unos árboles y abajo de el un lago.

El viento comenzó a soplar y lo que había visto tras de la ventana del salón, volvió a pasar. Solo que esta vez podías ver como caían lentamente en el agua.

Y de repente...
*Suena el celular*

Mi madre llamo
(Contesta)

M- Hola?

Y- Hola

M- Donde estas?

Y- Estoy en un parque

M- Cuando vas a llegar?

Y- En un par de horas

M- Porque? Te paso algo?

Y- No, estoy bien

M- Entonces?

En ese momento me quedé viendo como caían las hojas lentamente

M- Yuri? Yuriko, estás ahí?

Reaccione!

Y- Si, si, bueno voy a colgar

M- Okei, pero porfavor regresa pronto, si?

Y- Si, adiós

*Cuelga*

Cuando colgué, tome mi bicicleta e iba a dar una pequeña vuelta.

Cuando ya iba a irme a mi casa, escuché un ruido entre los arbustos, fui a investigar, era un gatito.

Muy pequeño, era de color negro y sus ojos eran una combinación de verde y café. Me puse a buscar a su madre o al dueño pero no habia nadie y no lo podía dejar solo.

Lo tome, lo cubrí con mi bufanda y lo puse en la canasta de mi bicicleta. Después de eso fui rápido a mi casa.

YurikoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora