8 años.

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—KyungSoo, baja eso.

— ¡No, dame a Baek!

—KyungSoo, Baek necesita hacer su tarea.

— ¡No es cierto, tú te lo quieres quedar!

— ¿Qué? ¡Yah! ¡A mí no me gruñas, gato pulgoso!

— ¡No me grites, calvo!

— ¡Kyung no está pulgoso!

— ¿Qué es todo este maldito escandalo? — bramo un pálido chico de cabello azulado. —ChanYeol, ¿Qué le haces a tu hermano menor?

El pelirrojo, quien sostenía en lo alto a un pequeño castaño y que también mantenía alejado con su pierna a un pelinegro, miro asustado al pálido.

— ¡YoonGi, ayúdame! ¡Este pulgoso no deja hacer su tarea a BaekHyun y así no puedo limpiar! —exclamo el más alto, siendo arañado por el pelinegro que le gruñía y con el castaño jalando su cabello.

— ¡Kyung no hace nada malo, hyung! — BaekHyun, el castaño que jalaba el cabello de Yeol, miro al pálido con suplica. — ¡Díselo, hyung!

YoonGi se acercó al más alto, haciéndolo tensarse y poner cara de horror. —Uno...— y ChanYeol dejo a su hermano en el suelo, corriendo lo más lejos que podía del pálido. —Ahora, ustedes dos...— el mayor tomo de las manos a los dos niños, llevándolos a sentarse en el sillón. —Tengan. — el peliazul les dio un pequeño libro, causando grititos emocionados en los pequeños.

— ¡Gracias, hyung! —BaekHyun abrazo del cuello a YoonGi, tomando al pelinegro de la mano. — ¡Vamos a leer, Kyung! —el niño salto emocionado, sentándose y poniendo el libro entre las piernas de ambos.

— ¡Yo leo! —KyungSoo tomo el libro, sonriente.


Hace mucho tiempo había un papá dragón que cuidaba de muchos dragoncitos, les daba comida rica y los protegía del frio. Los dragoncitos eran traviesos y les encantaba volar y morderse las colas entre ellos. El más pequeño de ellos era el único que tenía sus mismos colores y el que siempre andaba detrás de sí, pidiéndole que le enseñara a cazar para ayudarlo a alimentar a sus hermanas y hermanos. El pequeño era también el más energético y a menudo solía causarle problemas con sus demás hijos.

Un día, el más pequeño quemo sin querer una de las alas de una de sus hermanas y papá dragón se enojo mucho con su hijo, lo castigo y le prohibió salir de su casa hasta que aprendiera su lección. El pequeño dragoncito quiso pedirle perdón a su hermana y salió de casa, buscando a sus hermanos mayores, lo malo era que como siempre seguía solo a papá dragón, no conocía bien sus terrenos y termino cayéndose por un terreno resbaloso.

— ¡Oh no, el dragoncito! — exclamo Baek.

El pequeño dragoncito se asustó mucho, estaba perdido y herido. Lloro llamando a su papá dragón y a sus hermanos pero no lo escucharon. Entonces decidió ser fuerte como papá dragón y volver a casa por sí solo.

— ¿Y que más paso? — BaekHyun se encimo en KyungSoo, quien puchereaba hojeando el libro.

—Ya no hay más hojas...— miro con reproche a YoonGi, quien sonreía levemente.

—Eso es porque les estaré dando una nueva parte cada mes, dibujar y pintar es tardado ¿Saben? —respondió ganándose otra mirada ilusionada de parte de los pequeños. —Ahora terminen sus deberes.

— ¡Si, señor! — los niños corrieron hacia las escaleras, directo al cuarto de BaekHyun.

YoonGi sonrió recogiendo el libro, orgulloso de su obra.

—Ese pequeño monstruo solo te obedece a ti, te odio. — hablo ChanYeol con escoba en mano. —Si no fuera porque BaekHyun lo encontró en el parque, no lo hubiera aceptado.

—KyungSoo es un buen gatito, adora a Baek y lo protege. — el pálido se tiro al sillón, hojeando el libro. —Los híbridos no son malos, Yeol.

—Por ahora, espero que ese gato sepa cuidar de mi hermano.

El pálido sonrió, tomando su cuaderno para empezar a bocetar la siguiente parte del cuento.

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Para el verdadero papá dragón <3

Soo-Soo *[BaekSoo] Top!SooWhere stories live. Discover now