Soo-Soo *[BaekSoo] Top!Soo

19 años... FINAL

— ¡Yah, Baek! — KyungSoo bufo con las mejillas rojas y las orejas arriba. —Deja de burlarte.

El ahora castaño claro reía sosteniendo un gorro de santa con cascabel, meneándolo encima de la cabeza del pelinegro, disfrutando y soltando varios "aww" cuando KyungSoo se concentraba en el cascabel y su pupila se dilataba, empezando a jugar moviendo su cola de un lado a otro mientras doblaba su mano y le daba golpecitos al cascabel.

Puede que su chico fuera más rudo que cualquier otro pero seguía siendo un gato en varios sentidos y verlo abandonarse para jugar como cualquier otro minino, era preciado.

— ¡BaekHyun! — gruño antes de arrojarse encima de él, empezando a lamer su cuello para castigarlo.

— ¡Ay no, KyungSoo! ¡Basta! —empezó a gritar entre risas. La lengua de su novio era tan rasposa que era la máxima amenaza que KyungSoo usaba contra él cada que se portaba mal, lo molestaba o cuando le daba la gana. — ¡Duele, duele, duele!

— ¡Serás castigado! —KyungSoo empezó a morderle el cuello, haciendo chupetones en lugares imposibles de ocultar; lo posesivo de su hibrido jamás cambiaria aun cuando llevaran tanto tiempo juntos y un anillo en el anular de cada uno.

— ¡Pero no me gusta de esta manera! —puchereo picando las orejas de KyungSoo en un intento por que lo soltara.

—Oh, por eso no debes preocuparte. — la sonrisa que le dio el azabache al separarse, lo calentó y avergonzó a varios niveles. —El castigo donde hay nalgadas y donde lloras de placer, vendrá después.

—Oh joder.

—Oh si, y muy duro.

KyungSoo estaba más que agradecido con un Byun BaekHyun en su vida. Desde que escapo de aquella casona por los malos tratos y se quedó en el parque, temeroso y hambriento, visualizo su vida como miserable aun cuando lo encontrara un refugio. Fue un pequeño niño de siete años lo que lo hizo prometerle al mundo que sería el hombre/ hibrido más fuerte para poder protegerlo y amarlo hasta que se le acabaran todas las vidas existentes.

A través de los años, ambos se comprometieron y esperaban casarse cuando cumplieran 20 años y terminaran sus respectivas carreras de veterinario y médico. SeHun y YiXing, recientemente graduados como maestro y diseñador, se habían casado unos meses atrás, dándoles el último impulsito que necesitaban para dar ese pasó. El lindo conejito, JungKook, que encontraron hace tantos años en el parque, vivía a unos cuantas cuadras de distancia y seguía siendo novio de su humano Kim TaeHyung; ambos los visitaban con frecuencia además de ir a la misma universidad donde asistían, sintiéndolos como los pequeños hermanos revoltosos y escandalosos.

No necesitaban nada más, bueno, quizás una nueva alfombra ahora que KyungSoo la hacía deshecho al afilarse las garras o un gorrito nuevo de santa pero eran cosas que podrían comprarse luego. Primero que nada, BaekHyun quería ese castigo.

—Ok, vamos a la habitación.

FIN.

¡Espero les haya gustado mucho! A mí me agrado hacerlo y más si era para alguien muy especial.

Dragón, espero te haya gustado. Lo escribí con el corazón <3