Teatro del Terror

Pasos

Esta es la historia de un joven que se fue de excursión con su clase a una posada.

Al anochecer, él y dos de sus amigos hablaban sobre historias de terror para intentar a todos los que estaban presentes escuchando, entonces uno de éstos empezó a contar una pesadilla que tenía cada noche y que no le dejaba dormir tranquilamente. La pesadilla constaba de que él aparecía frente a su clase riéndose, mientras que al pasar el tiempo, una puerta de atrás se abría y entraba algo, que por alguna razón, sentía que no podía mirar, sin embargo, algo hacía que éste girara su cabeza a la fuerza y cuando está a punto de ver la cara de esa misteriosa figura, se despierta.

El joven que escuchó esa pesadilla de su compañero se estremeció, y le dió una sensación de que alguien que no estaba presente en la habitación le estaba observando.

A la medianoche, le dieron ganas de ir al baño, pero como tenía miedo después de escuchar varias historias de terror de sus compañeros, decidió intentar despertar a uno de sus amigos. Ninguno se despertaba, hasta que el compañero que contó su pesadilla se paró detrás de él sin decir ni una sola palabra.

El joven se asustó ya que su compañero estaba callado y no decía ni una sola palabra. Supuso que él quería acompañarle, solo que tenía mucho sueño.

Al llegar a la habitación del baño, su compañero abrió la boca y le dijo que volvería a su habitación, que tenía mucho sueño y éste se fue sin hacer caso a quien estaba acompañando.

El joven se quedó solo, pero como tenía muchas ganas de ir al baño, no pudo quejarse y tuvo que aguantarse el tener que quedarse solo en el cuarto de baño.

Al terminar de hacer sus necesidades, escuchó el sonido de la entrada a los baños abrirse lentamente, una puerta vieja chirriante que cada vez se hacían más y más molestos para el oído.

El joven imaginó que sería alguien más que quería ir al baño, pero al terminar de escuchar el sonido de la puerta abriéndose escuchó pasos de dos o más personas deambulando por el baño, al rato, se dió cuenta de que en las paredes que cerraban el váter para tener privacidad, habían letras desordenadas, como si un niño hubiera entrado a ese lugar y escrito sus fantasías. Pero había algo raro en esas letras que cada vez le hacían estremecerse más, los pasos detrás de la puerta seguían escuchándose, cada vez más y más fuertes, hasta que el sonido de esos pasos cesó.

Entonces, alguien envió un mensaje al móvil que tenía el joven, era el compañero que supuestamente le acompañó a él al cuarto de baño, diciéndole que él también fue al baño y no le encontró.

Al leer el mensaje, se volvió a escuchar el sonido de la puerta abrirse y escuchó pasos de tacones que se acercaban cada vez más a donde estaba él.

Del miedo, se alteró y forzó la cerradura intentando que nadie entrara en el lugar donde estaba él, entonces al darse la vuelta, vio escrito en la pared, su propio nombre y cómo las letras iban tornándose de color rojo hasta el punto en el que parecía estar escrito con sangre. Al ver su propio nombre escrito con sangre, la cerradura que forzó se abrió, y ahí estaba, la criatura que apareció en la pesadilla sonriéndole.