Mi pequeño amor | YoonMin [EDITANDO]

02

“ Hyung, ¿vas en mi escuela? ”

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—Entonces, ese niño de ayer, el que estaba solito, ¿es agradable? —Yoora preguntó amablemente y un tanto curiosa ante el nuevo posible amigo de su pequeño.

Mientras que JiMin, de solo recordar el encuentro de ayer, sintió sus mejillas arder. El nene era bastante tímido si de amistades se trataba, por lo general le costaba dar el primer paso, es por eso que le provocaba tanta vergüenza recordar lo del día anterior.

—Sí... Es simpático.

—¿Y cuál es su nombre? ¿Le gustó la paleta?.

—Se llama YoonGi y tiene diez años. Es mayor que yo por poco. —Era casi imposible no recordar su nombre, era bastante bueno en ello, casi nada se le escapaba de su memoria.

Yoora no pregunto más sobre el pequeño azabache. Conocía perfectamente la timidez de su nenito, y por eso mismo no deseaba incomodarlo por más risa que le dieran sus gestos.

—¿Y hoy iremos al parque?. —JiMin con nerviosismo asintió suavemente y apretó ligeramente las correas de su mochila.

Desde que tenía memoria iba a ese lugar, y prácticamente, se había vuelto gradualmente su sitio favorito. La respuesta a su pregunta era más que clara, no se perdería un día  de no ir, como todo niño necesitaba distraerse y definitivamente ese era el mejor lugar.

—Entonces hoy a las cuatro. —Yoora abrió la puerta del auto y dejó bajar a JiMin.

Por lo general ella llevaba al pequeño a la escuela, pero cuando habían inconvenientes respecto al chiquitín que ella cuidaba, no le quedaba otra opción que mandar al jovencito Park en el autobús.

El castañito bajó rápidamente y acomodó su mochila en la espalda.

—Pórtate bien. Te amo mucho. —La mujer se agachó para estar a la altura  de su niño y le dió un beso en su mejilla.

—Adiós mamá. —JiMin se despidió y comenzó a caminar, adentrándose cada vez más en la gran escuela.

Sus pasos eran lentos y pateaba una que otra piedra que se cruzaba en su camino. Sus movimientos eran torpes, jugaba con las líneas marcadas en el piso y se tambaleaba al caminar sobre la vereda.

—¡Hey, ChimChim! —Reconoció esa entusiasta voz y miró en dirección al sonido.

Se trataba de TaeHyung, un amigo de JiMin y que tenía justamente la misma edad que él.

—Hola pequeño. —Kim SeokJin, otro integrante del pequeño grupo. Tenía diez años.

Se conocían hace aproximadamente un año. En una de las actividades que el colegio realizó, fue ese día cuando hablaron por primera vez. Se trataba de una visita cultural, en donde –de un modo u otro– estos tres niños terminaron sentados en una misma mesa el día del paseo.

Claramente fue algo incómodo y extraño a la vez, ya que TaeHyung no pertenecía al mismo salón que JiMin, y en el caso de Jin, él era mayor a ellos, por lo que conocer a esos dos niños era prácticamente imposible. Ante la "obligada" unión de estos tres pequeños, TaeHyung decidió romper el hielo y comenzó a hablar, SeokJin le siguió y por último se unió el castañito. Desde ese día nació oficialmente su amistad y comenzaron a hablar y verse frecuentemente en el patio de los menores, pues al ser Jin mayor a ellos, pertenecía a otra parte de la escuela, pero durante los recesos de todas formas iba hasta donde los chicos.