Ayúdame. [G!Ink x lectora (+18)]

Capítulo 6

La joven seguía caminando con Ink detrás de ella, después de que le dijera como se sentía el esqueleto no volvió a decir palabra, lo cual molesto más a la chica que solo caminaba molesta por que este la perseguía.

-¡Deja de seguirme!

-Pero... Quiero que estés segura.

-¡No quiero estar segura! ¡Quiero morir y estar con mi pequeño!

-No puedo permitir que algo te pase...

-Me das asco... Como si eso te hubiera importado antes.

"-¡Ho-hola!

La joven giraba su cabeza encontrándose con un esqueleto peculiar, alto y con unas grietas en su cráneo, si hubiera sido otra persona seguramente hubiera corrido lejos de aquel extraño pero, su dueño y esposo era un esqueleto que experimentaba con otros de su especie, tal vez este era otro de ellos que aún no sabia a que se enfrentaba.

- Hola, no deberías estar aquí.

-¿C-como sabes eso?

-Eso no importa, ven te llevare a donde perteneces.

-¿Sabes llegar?

-Bueno no esta lejos ¿cuanto llevas aquí?

-Acabó de llegar.

-Ya veo entonces te ayudaré a sentirte un poco más cómodo.

-¿Cómo sabías que no debo estar aqui?

-Si el señor de la casa te ve fuera del laboratorio seguramente se enojaray te hará daño así que no queremos que eso pase ¿o si?

-No entiendo ¿que laboratorio?

-Todos llegan aquí para ser experimentos, acaso... ¿el no te explicó nada?

-Bueno no se de quien hablas.

-Tu... ¿de donde vienes?

-Soy el guardián de las historias como la tuya."

-Vamos [T/N], sabes que si me preocupaba por ti, pero tenía prohibido entrar a las Au... lo sabías perfectamente.

-Eso no te impidió entrar a la mía y embarazarme ¿no?

-¿Entonces si era mío?

-¿Sabes cuántos días me torturó? El sabía que no era suyo, el imaginaba que era de alguno de sus conejillos de indias, los interrogó a todos y los mató a todos. A mi no me mató por que ¿dónde encontraría otra mujer tan servicial y astuta? Sólo por eso no me quitó la vida pero tan pronto mi bebé nació... el lo uso, experimento con el y yo siempre tenía la esperanza de que llegarías a salvarlo... No a mi, al menos a él que era una criatura inocente sin culpa de nada. Pero era obvio que no importaba cuantas veces llamará tu nombre... jamás llegaste.

-Después de lo que paso, tuve miedo de regresar... sabía que no debía hacer nada de eso y aún así te quería tanto que cada vez me era más difícil alejarme ¿qué me pasaría a mi si me quedaba? Mi trabajo era claro, pese a que me hubiera gustado renunciar a él no podía...

-¿Nunca me oiste gritar tu nombre?

-Lo oía todas las veces... Pero no podía ir, sabía que te llevaría o me quedaría y estaba prohibido...

-Y ahora por tu culpa... mi bebé esta muerto... ya no estará nunca más conmigo.