Huracán María

Jueves

Ya cuando pudimos salir de la casa, verificamos todo. La casa de mis abuelos y la casa de mi tía.  Habían perdido todo. La ropa, las camas, absolutamente TODO. Se encontraban muy desesperados preguntándose qué harían después de haber perdido todo. Todos los vecinos salían afuera a verificar sus casas y casa uno contaba lo que había perdido.

Después de ver todas las pérdidas nos reunimos nuevamente en mi casa y mía tía y mi abuela prepararon la comida. Cenamos todos juntos. Luego de eso jugamos cartas uno.

De repente escucho a alguien que dice: "Abran la puerta". Era la voz de papi. Sentí una felicidad inmensa. Abrí la puerta y lo abracé. Había caminado más de 15 kilómetros para poder llegar a casa. Nos contó que no pudieron venir ya que al salir del hospital no había paso para llegar a la casa, por tantos derrumbes que hubieron por el huracán María. Mi papá estaba desesperado por saber de nosotros.

El tenía que irse de nuevo al lugar donde se estaban quedando porque si se quedaba acá en la casa pues mi madre y mis hermanos se iban a preocupar.

Yo decidí irme con el, ya era muy tarde y no quería dejarlo solo. Tenía miedo que le pasara algo.

Busqué tres bultos y los llené de ropa, "flashlight", comida enlatada, alcohol y las cosas necesarias.
Cuando íbamos de camino pude ver todo el desastre que hubo. Se cayeron postes, muchos cables, habían casas destruidas. Llevaba 35 minutos caminando y ya no podía. Nos sentamos en un lugar a descansar. Seguimos caminando por la carretera principal y cada vez era más feo. Muchos más derrumbes. Algo espantoso. Llegamos a un lugar donde caían piedras si llovía duro. Pero esta vez si que cayeron piedras mucho más grandes. Pasamos eso y me dieron ganas de llorar. Todo estaba destruido. Teníamos que pasar por encima de los árboles. Continuamos El Paso, ya estaba oscureciendo mucho más. Habían más y más árboles caídos. Llegamos a un lugar donde había mucha gente tratando de sacar un derrumbe que hubo al frente de una casa. Se veía como la tierra había entrado a la casa. Fue algo muy triste. Pude pasar en medio de la gente y vi muchos carros. Alguien me grito "allí esta tu mamá desesperada, ve a verla". Yo rápido empecé a buscar y vi a mami en el carro, fui donde ella y la abracé. No pude contener mis lágrimas. Igual con mis hermanos. Todo lo que vi fue muy impactante- dije.

Llegue a donde ellos llena de tierra, pero no me importó estar así, solo quería saber de ellos y saber si estaban bien.

Ya que no había pasó para llegar a mi casa en carro pues tuvimos que regresar al lugar donde se estaba quedando mi familia. Después decidimos comprar comida en el pueblo. Fuimos, era un completo desastre también. La gente loca, desesperada. Fuimos a ver qué fast food estaba abierto y solo había comida China. Estaba bien lleno, cuando verificaron solo quedaban "tostones" y una carne media rara. —sin comentarios jaja.

Mi hermano menor volvió a quejarse que tenía dolor y era tanto que volvimos nuevamente a llevarlo al hospital. En el hospital era otro desastre. No había agua, los baños no los limpiaban, había luz en una sola parte. Mejor dicho, ese hospital no estaba preparado. Atendieron a mi hermano y con la autorización de mis padres tenían que hacerle como una operación. Dijeron que querían trasladarlo pero no podían, ya que en todo el país no había medios de comunicación. Pasamos la noche allí. Yo me fui al carro de mi hermano a dormir...