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–¡¡Len!! Despierta –gritó Rin, la carismática hermana de len

–ya voy — dijo cubriendo su cara con la almohada

–¡¡despiértate!! Si no te pondré un hermoso vestido

–¡¡nooo!!– saltó de la cama

–entonces ponte el uniforme sino quieres que te ponga un vestido – gritó desde la parte de abajo de la casa. Len se puso el uniforme y salió de su habitación

–vamos, nadie notará que eres chico

–no — dijo sentándose en la mesa

– ¿te digo lo mejor de tenerte como hermano?

– no — ya sabía lo que iba a decir

– que si me enfermo tú podrías remplazarme sin que nadie se de cuanta

–no — len solo contestaba cortante

–pero tienes cara de bebé

–cállate

–bueno, bueno, ten –puso un plato en la mesa –come

En realidad, Len desconocía por completo qué obsesión tenía su hermana con vestirlo de mujer, lo molestaba a diario, y más con el hecho de ser mellizos. Además que el peinado de Len no le favorecía mucho, al ser una pequeña cola de caballo. Len ya estaba acostumbrado al constante acoso de parte de su hermana, nada podía seguir peor . . . Bueno, en realidad no, de pronto, todo el instituto comenzó a llamarlo "shota", cosa que era aún más insoportable

—vamos

—no

—por favor

—no

—anda

—no, y ya deja de insistir, simplemente no lo haré, además si tienes tantas ganas hazlo tú

– pero soy tu hermana mayor

– no es cierto, somos gemelos

– soy una hora más grande que tú y me tienes que obedecer

–no

–solo porque ya casi llegamos a la escuela pero no te libras de mi — dijo dejando en paz a su hermano

En cuanto ambos llegaron fueron a sus respectivas clases. Ambos tenían horas de descanso, la mayoría del tiempo Len se quedaba en el aula haciendo sus deberes o comiendo y las veces en las que su hermana coincidía con él, estaba con ella. Ese día, en la hora donde se suponía que Rin acompañaría a Len, ella simplemente no llegó y Len tuvo que soportar a todas las chicas a su alrededor que susurraban "discretamente", según ellas, lo tierno que era. Pasaron las clases y Len no volvería a ver a su hermana hasta la hora de la salida, en la que tardó un poco en aparecer

–¿dónde estabas?— Len ya quería regresar a su casa

–solo un aviso

– ¿de qué?

–dice que será una junta –ambos empezaron a caminar

– ¿de qué o qué?

–de los padres de familia pero nosotros tenemos un pequeño problema con ello

– ¿y qué pasará con eso?

–le dije a la profesora que teníamos ese problema pero no me hizo cazo

– pero si nosotros no podemos hacer nada respecto a eso

–pues . . . Ella se mostró muy estricta y creo que nos odia

– ¿qué? ¿Por qué?

–no lo sé pero . . . –Rin estaba por continuar pero pudo ver a lo lejos algunos oficiales de policía fuera de su casa

–¿quiénes son?

–no lo sé, parecen policías, hay que acercarnos –ambos se acercaron — disculpe señor ¿qué pasa?

– ¿ustedes son los hermanos kagamine?

– si . . . ¿Por qué?— preguntó Rin confundida

–¿y sus padres?

– están muertos

– ¿viven con un familiar?

–no

–¿conocen alguno de sus familiares o tienen familiares en la cuidad?

–no . . . No creo

– entonces no pueden vivir aquí

–¿por qué ?

– ustedes son menores de edad y no pueden vivir sin alguien que los supervise

–¿qué pasa? – len, que hasta ese momento había estado fuera de ese escenario se acercó

–acompáñenme – los tomó a ambos de las manos y los subió a su auto

– ¿qué? Nooo –gritaba Rin tratando de salir pero simplemente la puerta estaba cerrada con un oficial interviniendo que pudieran abrirla

Después de un rato mientras los policías inspeccionaban la casa, dos de ellos se subieron al auto en donde estaban los gemelos y comenzaron a conducir hacia un orfanato. En el camino, Rin estaba histérica, no paraba de hacer preguntas muy frenética y preocupada

— ¿a dónde nos llevan? ¿y si nos separan?

–no te preocupes, yo trataré de que no hagan eso

– pero yo quería vestirte de maid

– ¿qué?— toda la tensión y seriedad del momento se arruinó

– y ahora no podré hacerlo

–niños, vamos – los bajaron del auto y los llevaron escoltándolos hacia un enorme edificio

Los policías hablaron un rato con la directora del lugar mientras que los hermanos se encontraban sentados a unos pocos metros de ellos. Al parecer los policías iban de un supuesto programa del gobierno en donde se procuraban a los niños huérfanos o con adultos irresponsables que cuidaban de ellos

– tengo miedo Len, ¿y si ya no vamos al instituto?

–mejor — dijo muy serio, para él era un alivio

– pero . . . ¿Y mis amigas?

– mejor, ya no te agobies

Después de la plática entre los oficiales y la directora, una chica muy amable los llevo ambos a una habitación que compartían con otros chicos más pequeños que ellos, que después de unos días se fueron juntos con una familia. Lo mismo pasó con Rin, meses después de haber ingresado en el lugar llamaron a Rin

– Rin Kagamine, venga conmigo –una chica de cabello castaño y corto apareció y se llevó a Rin de allí y Len no volvió a verla

Para Len era un problema, extrañaba a su hermana, no había chicos de su edad en el orfanato, solo niños pequeños y adolescentes muy grandes que casi cumplían la mayoría de edad, además que él no solía ser muy sociable. Con su timidez y soledad se sumió en lo que podría pasar en algún futuro, al ser un adolescente, lo más probable era que no lo adoptaran, los más pequeños tenían todo en su favor y los ya jóvenes solo esperaban a cumplir la mayoría de edad para salir de allí. No quería ser como esos chicos, no estaba dispuesto a  esperar tantos años solo, aunque tampoco quería ser adoptado por alguien, así que lo mejor que se le pudo ocurrir fue escapar del lugar

Hola chicos, volví :D, les dije que iba a editar este libro y estoy comenzando con este capítulo. Me di cuanta que les gustó mucho y decidí primero editar este y cuando termine comenzare a seguir con la otra historia ("entre más me acercó . . . Más te alejas"), que para los que no saben, es la continuación de este libro

Mi chico shota (lenxkaito) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora