One-shot's (TsuMioda)

IruTsu

|| — Si, vengo a revivir esta wea que nadie lee con otro Ship que nada que ver pero es igual. (?)

— Hey, Tsumugi.

— .. Hmn. —

— Tsumugi.

— . . . —

— J-joder Tsumugi.. —

De nuevo ocurría. La peliazul estaba durmiendo en sus piernas, la razón: Se había desvelado en uno de sus casuales maratones de anime mientras la inventora había pasado una semana fuera de la ciudad debido a su trabajo.
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La peliazul había pasado su tiempo en lo que ella llamaba "cosas simples", siendo estas como levantarse temprano, limpiar un poco y en la tarde dejar que su lado otaku surgiera, leyendo manga, viendo anime, o tan solo confeccionando nuevos cosplays de sus amados personajes 2D. Sin duda sabía aprovechar su tiempo aunque estuviera sola, pero podía decir con seguridad que extrañaba a la joven inventora.

Había pasado una semana completa desde su partida y finalmente al llegar a su hogar lo primero que vino a su mente era ver a Tsumugi, sin embargo probablemente esta se encontrara dormida debido a la hora.

Prácticamente era de madrugada y gracias al abrumador silencio de su hogar sabía que tenía razón, enseguida dejó su equipaje al lado de la puerta y soltó un suspiro pesado, odiaba ir a esas reuniones con los empleadores que solo colmaban su paciencia con cada idiotez que escupían, necesitaba un respiro.

Con vagancia subió las escaleras y se dirigió a la habitación de ambas, dónde la luz aún continuaba encendida. ¿Estaba despierta?

Levantó su mano y giró el picaporte, en cuestión de segundos sus ojos se toparon con la cosplayer, quién abrazaba una almohada que ocupaba su lado de la cama. El televisor seguía encendido con un capítulo reproduciéndose, no pudo evitar sentir ternura, si bien había llamado a Tsumugi avisándole que llegaría ese día no creía que realmente la intentara esperar despierta.

Resignada, detuvo el capítulo y apagó el televisor, buscando dormir pronto. Una vez dejó todo en orden solo dejó encendida la pequeña lámpara en su mesita de noche y procedió a acostarse sin despertar a su contraria.
De alguna manera logró acomodarse sin hacer demasiados movimientos, ahora podría descansar y mañana olvidaría por completo que siquiera había estado una semana con los vejetes de sus empleadores, no los soportaba por más de una hora, por lo que naturalmente había sido un martirio.

Pronto amanecería y ella no había dormido aún, genial. Con ese pensamiento en mente cerró sus ojos y dejó que su mente quedara en blanco, si tenía suerte en unos cuantos minutos sería capaz de dormir.

Antes de que cayera dormida fue capaz de percibir como su cintura era abrazada vagamente por la adormilada peliazul, ¿La había despertado?

— ¿Tsumugi..?

— H-hmn..

— Hey, Cosplayer, ¿No deberías estar dormida?

— ..Lo estaba. —

-Murmuraba la peliazul mientras acomodaba su cabeza contra el hombro de la inventora, sintiendose en un pequeño trance con solo el hecho de poder sentir de nuevo la calidez que siempre lograba relajarla y tanto amaba.

— Debiste haber dormido a tu hora usual, Bakagane.

— Si lo hacía no tendría oportunidad de recibirte adecuadamente. Aunque soy tan simple que terminé dormida antes.

— Mi hermoso cerebro pensó que harías algo parecido.

Dijo con tranquilidad para luego girar un poco su cabeza y besar la frente de la adormilada cosplayer, la cuál solo respondió con una pequeña sonrisa y un modesto tono rojizo en respuesta a sus palabras. Cubrió a ambas con las sábanas con su mano libre y cerró sus ojos nuevamente.

— Buenas noches, Miu.

— 'Noches, Tsumugi.

Fue lo último que se escuchó en ese momento, ya que debido a la tranquilidad del lugar y la compañía de una simplemente relajaba a la otra, cayendo dormidas en solo minutos.

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Ya había amanecido y sentía ganas de matar a cualquiera, ¿Por qué no podía dormir aún más? Fácil, Tsumugi se había levantado minutos antes apenas sonó la maldita alarma y al parecer preparaba el desayuno, o eso podía deducir al oír ruidos de la cocina. Sin ella junto no podía dormir, pero tampoco deseaba levantarse y los rayos del sol que entraban por la ventana no ayudaban en nada.

— Joder.. —

Fue lo primero que dijo antes de que la puerta de la habitación se abriera y dejase ver a la chica con una bandeja en sus manos, indicando que no se equivocaba cuando suponía que había preparado lo suficiente para ambas.

— Vamos pequeña osa perezosa, deberías desayunar. Incluso traje un poco de café.

— Phg...

Aunque fueran vagos sus movimientos se levantó y acomodó algunos mechones de su cabello antes de mirar a Tsumugi, quién ya estaba sentada sobre su lado de la cama, aún sosteniendo la bandeja que traía un par de Emparedados, jugo de naranja y su amado café.

— Espero que no sea demasiado simple al ser hecho por un personaje tan plano como yo.

— Sabes perfectamente que no eres simple, Bakagane.

Murmuró con una expresión resignada a que Tsumugi no dejaría de denominarse así por más que le repitiera que no lo era. Así era ella, y terca o no de todas formas la amaba.
En sus manos tomó un emparedado y comió un bocado de este, mientras su contraria hacía lo mismo.

Ya era más tarde, ambas se encontraban en el living mirando una serie de la que Tsumugi había comenzado a ser fan, parecía increíble que hubiera salido de su habitación con sus abrumadoras ganas de dormir, pero no podía decirle que no ante los pucheros que se asemejaban a los de una niña pequeña, dónde claramente era débil y la peliazul lo sabía, era frustrante en cierta forma.

La joven cosplayer comenzó a "cabecear" un poco conforme los capítulos de la serie transcurrían, por lo que una idea llegó a su mente, en un movimiento cuidadoso se acomodó y apoyó su cabeza en las piernas de la rubia, acurrucándose contra ellas un poco.

— ¿H-huh? ¿T-Tsumugi?

— Solo deseaba recargarme en tus piernas, ¿Está mal?

— N-no precisamente p-pero..

— "Pero"..?

— ¡B-bueno, ya sabes!

— No lo sabré hasta que lo digas claramente, osa perezosa.

— S-solo.. M-me siento un poco nerviosa si te recargas en ellas.. e-es todo. —

Admitió casi murmurando mientras maldecía por lo bajo, por otro lado, la peliazul mostró una gran sonrisa y luego de mirar de reojo a Miu por unos segundos cerró sus ojos mientras aún se acurrucaba contra sus piernas, después podría ver su serie, ahora todo lo que necesitaba era a la joven inventora.

— ¿D-dormirás ahí ..?

— ¿Y por que no? Eres bastante suave.~

— U-umh..

Sin manera de defenderse dejó de discutirle y se resignó a ello, por lo que solo se limitó a acariciar un poco la cabeza de la chica y suspirar pesadamente luego de unos segundos, dejando que el tiempo pasara lentamente mientras estuvieran juntas, ni siquiera recordaba por que se encontraba tan irritada la noche anterior, por lo que era bueno en parte, cuando estaba con Tsumugi no existía nadie más y nadie más le importaba.

|| — -La apedrean por actualizar un año después del último capítulo y ni siquiera con el mismo shippu.-
Ahq.

Emh, en parte esto es algo que le debía a ella, y que mejor que un día antes de su cumpleaños mientras yo organizo el resto de sus sorpresas. (?)  CatitaCortesMidolo, Luego te amorseo más y te doy más regalos. -Wink wink- ¡Feliz cumpleaños adelantado por un día para que nadie me gane por que tengo que marcar territorio! (? Volim te, Darlin'. ♡