Midoriya Izuku Escenarios [DekuxLectora]

7

─Alone─

Y allí estabas, aún siendo ya una joven muy bella, excluida al máximo por los demás, por algo tan estúpido como no poseer kosei, 14 años, 14 años siendo abusada por todos tus compañeros, de clase, de trabajo, de clientes.

Sentías que eras la burla, y tras esos largos años, ya a tus 20, caíste en una gran depresión, sin amigos, ni parientes queriendo ser cercanos a ti, sólo una cosa pasaba por tu mente, saltar, saltar al vacío desde ese décimo piso.

Respiraste, serena, mientras un tumulto de personas se juntaba debajo de ti, aunque no creyeras en ello, quizás el destino te necesitaba allí, o quizás simple suerte, un joven héroe pasaba por allí, y no dudó ni un segundo en intentar ayudar a la fotógrafa que en tantas veces había visto fotografiarlo, pero seamos sinceros, ¿quién rayos necesitaba a una extranjera? ¡Alguien quien ni siquiera estaba relacionada con la cultura del país!

El de cabellos verdes subió tan rápido como pudo hasta legar donde ella.

─ ¡Por favor joven, baje de allí!

─Sólo necesito un pequeño espacio para respirar.. Por favor..

─Vamos.. no sea así.. ¡Le aseguró que hay muchas personas preocupadas por usted!

─ Claro que no, sólo se encuentran allí para ver lo que fuere a hacer, y festejar que alguien salvó mi vida, héroe. -Respondiste con tu típico acento.

Te asomaste un poco más por el gran ventanal, mientras el de orbes verdes se estremecía ante el tacto que fingías tener sobre el asunto.

─Si ellos no lo están, yo si lo estoy, ¿Realmente no tiene a nadie consigo?. No hay problema, yo seré su amigo, su pareja, lo que usted quiera, pero por favor, no se haga daño de tal magnitud..

—¿Y qué cambiaría si no lo hago, si no saltó y me rompo todos los huesos de mi cuerpo mientras mis sesos se esparcen en la calle y él pedestal?

— Perderás lo más valioso que puedes tener, tu vida. Prometo que si bajas de allí yo seré alguien muy importante para ti al igual que tu para mi.. Por favor, joven..

Le creiste, no querías estar sola. Tomaste su mano dispuesta a bajar del marco del ventanal, pero para tu desgracia resbalarse golpeándote en él mentón, colgabas del ventanal, ahora arrepintiose de su actitud, aferrándote de la vida. la vida que pendía de un hilo.
Y él muchacho logro salvarte,
Y él muchacho arriesgose sin salvarse,
y él joven cayó en coma,
Y la chica arrepintiose,
Con la culpa carcomiendo su cerebro,
Con gran dolor, por hacerle tal cosa pudiendo haber sido hasta su futura esposa.