Cómo conocí a Lily Del Valle.
(Y la convencí de estar a mi lado).
Hamburgo, Alemania.
Mucho se ha dicho y especulado acerca de qué es lo que yo tengo que decir con respecto a cierto artículo que se publicó sobre mí hace un mes y que ha causado algún revuelo entre varias personas. No es desconocido para nadie que soy futbolista, no escritor, de manera que hacer artículos no es lo mío, pero tras comentarlo un poco con la persona que dio origen a todo esto, he llegado a la conclusión de que podría ser productivo (y entretenido) dar mi versión de los hechos. Lo hago más por ella que por mí, entiéndase. Sin embargo, no esperen diálogos emocionantes y precisos, esto es más un monólogo que un relato porque no tengo una memoria tan exacta como para repetir palabra por palabra lo que se dijo en determinadas circunstancias.
Soy un hombre parco con las palabras y reservado con mis emociones, tan es así que la prensa ha usado los adjetivos "frío y calculador" para definirme, y tienen razón, al menos en la parte futbolística; sin embargo, el que sea reservado con respecto a mi vida privada no significa que también sea frío y calculador en este ámbito. No considero importante el tener qué preocuparme por lo que los demás digan sobre mí, no he llegado a donde estoy por tomarle importancia a la opinión que la gente tenga de mi persona, pero no puedo ignorar la pregunta que tantos conocidos y reporteros me han hecho al respecto de si he leído el artículo que publicó recientemente la doctora Lily Del Valle acerca de cómo nos conocimos ella y yo. Me importa porque se trata de ella, y por supuesto que lo he leído, su redactora es mi novia y dado que en él habla de mí, se sobreentiende que antes de publicarlo la doctora Del Valle me preguntó si tenía algún inconveniente con que lo hiciera. Sin embargo, a diferencia de Yuri, puedo entender por qué la gente tiene tanto interés por saber qué es lo que yo pienso sobre eso.
Supongo que para aclarar dudas bastaría con responder a un par de preguntas a los reporteros, pero me molesta hablar de mi vida privada en público, y sobre todo cuando el tema principal es la mujer que amo, porque ella no pertenece a mi ambiente y esto le está afectando más de lo que debería. En mi opinión, lo que mejor puedo hacer para mantener contenta a la prensa (y a la gente) sin la necesidad de que Yuri sea molestada es contar mi versión acerca de cómo nos conocimos ella y yo, lo cual además daría un buen complemento a su historia. Sería muy aburrido que la gente que esté interesada en esto (que por lo que veo, es mucha) se vea obligada a leer lo mismo desde dos puntos de vista diferentes, así que me limitaré a hablar de lo que Lily no tocó en su recién publicado artículo. No tiene caso, por supuesto, que vuelva a repetir que nos conocimos en el partido de fútbol inaugural de la Copa Azteca, un torneo que se organizó en México, pero tal vez valga la pena señalar que no esperaba conocer a alguien como la doctora Del Valle ese día. Confieso que aunque sabía que Elieth iba a presentarme a su mejor amiga, yo no estaba interesado en conocerla, frecuentar chicas no es precisamente una tarea en la que soy bueno, de manera que no me llamaba la atención el tener que socializar con una muchacha con la que no tenía muchos nexos en común. Pero si hubiese sabido desde antes que Lily Del Valle iba a causarme tanto impacto, le habría preguntado a Elieth por qué tardó tanto tiempo en hablarme de ella.
El día en el que Yuri y yo nos conocimos, pues, me encontraba con mi Selección cuando se acabó la breve ceremonia de inauguración de la Copa Azteca, y como futbolista consagrado que soy esperaba ver el partido inicial para tomar datos sobre mis futuros rivales y sus disparos (siendo portero, esto último era lo que más me interesaba). Yo estaba invitado a ver el juego en el área reservada a la hija del embajador francés, la cual ya he dicho que es mi amiga, pero mientras esperaba a que ella llegara permanecí unos minutos a las afueras del estadio con algunos compañeros de Selección, viendo cómo un par de ellos se exponían al ridículo al querer conquistar a la primera pobre muchacha mexicana que se les cruzara en el camino (abro un paréntesis para comentar que, sin importar si son de Alemania o de México, las chicas suelen opinar que Ryo Ishizaki tiene cara de mono*). De momento me pareció divertido ver la manera en cómo Ishizaki y Urabe se exponían a la burla y al rechazo, pero no me pareció tan gracioso cuando vi venir a una preciosa joven de cabello castaño e Ishizaki hizo el favor de ahuyentarla antes de que siquiera tuviera la oportunidad de decirle "hola"**. La muchacha hablaba inglés, que fue el idioma en el que rechazó a Ishizaki, pero por sus rasgos se notaba que era mexicana, de manera que pensé que tal vez tendría la oportunidad de verla otra vez, si es que ella seguía acudiendo a los partidos del torneo. Aguanté muy bien las ganas de querer golpear a Ishizaki por ser tan imbécil, y me resigné a que de cualquier manera yo estaba en México para jugar un torneo y no para conquistar mujeres, pero el destino me sonrió al hacer que esta joven se sentara cerca de mí en la zona de las gradas destinada a la hija del embajador francés. ¿Sería ella la mejor amiga de la que tanto me había hablado Elieth? Había una alta probabilidad de que lo fuera, así como también había una posibilidad muy grande de que pudiera comunicarme con ella sin necesidad de una tercera persona que sirviera de traductor. La joven parecía estar muy concentrada en el encuentro, el cual resultó ser decepcionante para el anfitrión (futbolísticamente hablando), de manera que no notó cuando salvé la distancia que nos separaba y me senté junto a ella.
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Cómo conocí a Lily Del Valle [Captain Tsubasa]
FanficTras la publicación de las declaraciones acerca de cómo Lily Del Valle conoció a su famoso novio, el propio Genzo Wakabayashi decide dar su versión de los hechos. One-shot Genzo x Lily, complemento de "Cómo conocí a Genzo Wakabayashi". Fanfic de Cap...