Capítulo Único

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Esa iba a ser una de las temporadas más inolvidables en sus vidas.

Temporada Olímpica: todo se resumía en esas dos palabras que hacían que el corazón de Yuzuru se estremeciera por el simple hecho de pensar en todo lo que conllevaba. Tenía sentimientos encontrados, por un lado la emoción de nuevos desafíos en su carrera y por otro la posibilidad de despedir de la pista al mejor amigo que tuvo en ese hermoso deporte. 

Lo habían hablado mil veces, el japonés todavía podía sentir a flor de piel toda la tristeza y el dolor que lo invadió cuando Javier mencionó por primera vez la palabra "retiro". El español decidió que se esforzaría por hacer un gran trabajo y le demostraría a todos, a pesar de que se iría, la gran determinación que poseía para llegar con su mejor amigo al podio. Sabía que era momento de que su compañero de pista se fuera, pero no le agradaba la idea de estar sólo. Sin Javier en la pista, el patinaje dejaría de ser divertido para él.

Esa temporada sin dudas había sido ver al ave fénix renacer de sus cenizas. Javier había tenido una recuperación sorprendente, revelándoles a todos que todavía tenía mucho para dar y que no se dejaría vencer tan fácilmente por los nuevos jóvenes con saltos impresionantes.

Si Yuruzu tenía que esforzarse por ambos lo haría por él, especialmente por Javier para darle la mejor de las despedidas, pero sobre todo, Javi no cejaría en su empeño en una medalla olímpica porque sabía que Yuzu estaría en el podio también y no había nada más que deseara en el mundo que estar en lo más alto del mundo junto a él, de nuevo como en los viejos tiempos. 

Esos viejos tiempos cuando eran jóvenes y felices, cuando no había patrocinadores, ni rivalidades, ni prensa amarillista que se metiera entre ellos, cuando solo eran dos chiquillos enamorados... aunque ellos no lo sabían aún. Cuando podían amarse libremente sin tener que ocultarse y conservar apariencias. Cuanto extrañaba tomar esa suave y pequeña cintura entre sus manos y abrazarlo por horas perdiéndose en ese dulce aroma que irradiaba Yuzu, su Yuzu.

Tenían que hacerlo, ambos tenían que estar ahí como siempre debía haber sido. Algunas veces no pudieron estar juntos, pero ésta era su última oportunidad para estar juntos de ahora en adelante y por lo que les quedara de tiempo. Yuzu se debatía internamente para descifrar todo lo que supone ese retiro... ¿Sería un final definitivo? O ¿Es que existía la posibilidad de algo más? ¿Había algún futuro para aquello que su corazón sentía? ¿Cómo sería competir sin Javi a su lado para hacerlo sentir seguro? 

El japonés no quería ni podía imaginárselo. Una vida sin Javi... ¿Sería capaz de sobrevivir algo así? ¿Y Javi? Javi no estaba mejor que Yuzu... Él sentía una inmensa tristeza por cerrar una de las etapas más emocionantes de su vida. 

Era más que obvio: Yuruzu lo remplazaría y vendrían mejores y más jóvenes patinadores con los que casi podía sentirse obsoleto a lado suyo. Esos pensamientos rondaban por sus mentes sin cesar y los acompañaban incluso en los entrenamientos. Desayunaban, comían, cenaban angustia y dolor. Y así fue hasta que el tan anhelado y a la vez temido día llegó. Estaban ya en las olimpiadas, listos para enfrentar su destino. Yuzuru estaba sumamente nervioso, sentía todo el peso del mundo sobre sus hombros. Tenía miedo de fallar, de caer como en las olimpiadas pasadas. Pero justo antes de salir, Javi se acercó a él y tomando su mano entre las suyas le dijo: —No pierdas la fé. Yo creo en ti, Yuzu. Hazlo por ti, hazlo por nosotros.

La sonrisa de Javi, cálida como el sol disipó todos sus miedos. A pesar de que todo el mundo los observaba, Javi besó la dulce mano de Yuzu. Éste se estremeció mientras sentía que un fuego recorría sus entrañas. El miedo se había ido y ahora solo quedaba la certeza de que triunfaría y que Javi haría lo mismo. El beso que le otorgó el español le había llenado de la determinación que necesitaba. Se sentía listo, capaz y seguro. Sabía lo haría bien, lo haría por ambos, por todos debía demostrar de lo que era capaz. Quería mostrar que podía ir más allá de lo que todos habían visto.

Mi sueño junto a ti  [YUZUVIER]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora