Sufrimiento

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Su interior vibraba.

Vaya que lo hacía; Renjun trataba de aclarar su mente con los acontecimientos recien pasados pero, ese maldito vibrador en su culo no lo dejaba pensar claramente. Su mente estaba turbia, queria gemir con ganas, pero los padres de Jeno se encontraban abajo en la sala viendo televisión ajenos a todo, como si en el cuarto de su hijo no estuviese pasando lo que sucedía allí.

Renjun con sus mejillas arreboladas, la falda subida hasta la cintura mostrando que no traia sus pantaletas puestas, las cuales se encontraban en el piso muy lejos de su alcance; trataba inutilmente de quitarse al menor de encima, quien disfrutaba de la bella vista, sonriendo a su sufrimiento; tomando sus muñecas, impidiendo que el mayor se ocultase en ellas mientras trataba de reprimir sus gemidos mordiendo su labio inferior.

Pero que hermosa y esplendorosa vista tenia.

Jeno... por favor..-— Los ojitos del pelirrojo lagrimeaban del éxtasis, su carita denotaba frustración y un deje de molestia. Trataba de acallar sus gemidos. Se revolvía en la cama con cada vibración deliciosa.

Y Jeno se regodeaba de eso. Aumentando o disminuyendo la velocidad.
Cómo había esperado por esto desde hace bastante tiempo.

Jeno suspiró al ver como el pequeño Renjun apretaba las piernas en un intento de controlarse. Su placer era intenso y sus temblores se lo confirmaban. Esas delgadas piernitas cubiertas con esas medias lo hacian ver sumamente delicioso, y Jeno no tenia reparo en deborarlas. Dejarle cuanto chupeton pudiera.

Y sin pensarla dos veces lo hizo.

Soltó los brazos del mayor quien jadeaba de manera ruidosa, estaba a punto de entrar en un colapso de extasis puro, pero Jeno lo sacó de manera cruel de ello, disminuyendo la potencia de las vibraciones, frustrando al pobre pelirojo.

¡Jeno..no!—Renjun alzó un poco la voz, el mencionado estaba entre sus piernas chupando la piel sensible que estaba al descubierto.

El pobre Renjun se afirmaba de los cabellos del pelinegro, despeinadolo, apretando y jalando cada vez que el maldito vibrador tocaba una fibra sensible en su interior, haciendo que jadeara y gimiera lo mas silencioso que podía.

Jeno subió cada vez más, metiendo a su boca el miembro erecto del mayor, quien ahogó un grito al cubrirse la boca con una mano, mientras se afirmaba del cabello del menor tomando mechones en un puño. La sensación era deliciosa, el interior calido de Jeno rodeandolo lo hacian subir al extasis, su lengua gloriosa moviéndose con destreza por su extensión era la puta gloria y si el menor seguia con ese ritmo de mete y saca, seguramente se correria pronto, demasiado pronto, tanto que ya lo sentia muy muy cerca.

Jeno, me voy a correr...— El pequeño renjun articuló como pudo entre la bruma del placer.

Y el susodicho lo hizo otra vez. Se separó del mayor, volviendo a frustrarlo. A Jeno le encantaba ver esa carita sonrojada y cubierta de lagrimas, suplicar. Aunque esa fuese la primera vez que lo veia de esa forma y esa fuera la primera vez que lo vería suplicar.

Sabes Juniie... el otro día vi en Internet algo que me dejó muy caliente y no pude evitar imaginar que eramos nosotros. Así que espero cooperes. — Jeno le dedicó una sonrisa inocente , como si lo que estaba a punto de hacer no fuera una perversidad. Renjun tragó saliva, pero esperó a lo que sea que el menor iba a hacer,total, ya estaban calientes y Renjun no se iba a engañar a sí mismo con que no quería y esas cosas. Se mordió el labio inferior al sentir que el vibrador aumentaba su velocidad poco a poco.

Cuando vi un vídeo de bondage no pude evitar pensar en que te verías hermoso atado. Y como no tengo ninguna soga, tendremos que usar esto. — Dijo el menor mostrando la corbata del uniforme que había estado en el respaldar de la cama.

Renjun se resistió por unos segundos, revolviéndose para quitarse al menor de encima, tirando manotazos al aire para alejarlo, porque pues, tenía que fingir para que Jeno no se diera cuenta que lo estaba disfrutando en demasía. Fue hasta que sintió el vibrador moverse en su máxima potencia que flaqueó y se vio sumergido aún más en el placer, sus brazos perdieron fuerza y gritó del éxtasis cuando el vibrador logró rozar con su punto dulce repetidamente. Fue cuando Jeno logro inmovilizarlo de las muñecas y lo ató con la corbata, dejándolo completamente vulnerable y a su merced.

Renjun jadeaba de manera ruidosa y desacompazada, temblaba de manera incontrolable y las lagrimas brotaban de sus ojos. El mayor no le quitó la vista al menor, le suplicaba con la mirada que hiciese algo. Estaba a punto de correrse, si no fuese porque el menor apretó de manera placentera su erección, tapando la punta con su pulgar para evitar que se corriese.

Jeno, cariño...

Ambos menores escucharon la voz de la madre del mencionado, acercarse. Renjun apretó las piernas cuando sintió como Jeno tomaba el vibrador y comenzaba a sacarlo lentamente, jadeó sonoramente y Jeno le cubrió la boca acallandolo.

No hagas ruido Renjun...— Le susurró el menor con una sonrisa.—no querrás que nos descubran ¿O sí?.

Renjun negó repetidamente con lágrimas en sus ojitos, aún con la mano del menor  cubriendo la mitad inferior de su cara.

Cariño.. — La señora Lee tocó a la puerta—Tu padre y yo iremos a comprar la cena. Tardaremos como una hora, ¿Algo en especial que quieran comer Renjun y tú?.

Lo que sea...—Dijo el menor, comenzando a meter y sacar el vibrador del trasero del mayor, quien se revolvía en la cama.

muy bien.— Dijo su madre alejándose de la habitación.

Ambos adolecentes se quedaron quietos escuchando como la puerta principal se cerraba. Fue entonces cuando Jeno le dedicó una sonrisa con muchas intenciones ocultas.

—¿En qué estábamos?

Renjun solamente tragó saliva expectante y para qué mentir, emocionado.

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Muchas gracias por leer, errores van por mi cuenta y espero tengas un bonito DíaTardeNocheMadrugada.

Edición número 2: 210422

CrossDressing [ReNo-NoRen/NCTDream]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora