Siempre me gusto la escuela, claro hubo momentos en los que desearía que esos lugares no existieran, pero en su mayor parte la escuela es un lugar donde estar con tus amigos, donde te desarrollas, donde creas recuerdos buenos y malos.
Una de mis partes favoritas de la escuela eran las anécdotas, palabras y experiencias de los profesores.
A muy pocos les gustaba darnos palabras de aliento, palabras que en su momento no nos serían útiles pero conforme creces entiendes a los profesores, a sus palabras.
Una de las palabras que en su momento más me llegaron a desesperar pero después llegaría a entender fueron;
Al comienzo de la misma y a lo largo del tiempo reconocemos y nos damos cuenta de que la cultura a propiciado diferentes y accesibles líneas entendemos fundamentos, solicitamos, rectificamos, y creamos un sin fin de historias que por medio de la experiencia hacemos que el lector dentro del contexto en el que se encuentre se traslade a través de un espacio que como el estudio tiene sus variaciones
