Castiel como papá

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Era un día con un clima fresco y perfecto para salir al parque, estaba  viendo como mi pequeña jugaba, era muy linda y se parecía bastante a su madre solo que sus ojos eran como los míos y que tenia un carácter parecido al mio.

Estaba muy tranquilo hasta que una chica joven se sentó a mi lado su ropa no dejaba mucho a la imaginación y tenia una sonrisa que no me agradaba mucho, trate de ignorarla por completo pero comenzó a hablar.

-¿Te gustan los niños?- Que buena forma de iniciar una conversación, a penas hablo y ya me quería ir. 

-No-Tenia una hija pero no significaba que me gustaran los niños, mi hija no era una mocosa llorona y enfadosa.

-Lastima creo que tu serias muy bueno con ellos- 

-Supongo, ¿No tienes nada mejor que hacer?- Solo quería que se callara ya y me dejara tranquilo.

-No, estoy cuidando a mi sobrino- Se nota que es buena cuidando a los niños, pobre niño creo que ya huyo con la tía que tiene.

-Oh interesante- no se si es bruta o se hace la tonta porque no se da cuenta que no quiero hablar con ella.

Y comenzó  a hablarme de su vida, que le gustaba, que le molestaba, cuantos gatos tenia, que dejo de estudiar porque se aburría, cosas que no preste atencion y que tampoco me interesaban para nada. 

-Ya me quiero ir-Dijo mi pequeña que al parecer noto la parecencia de la mujer que estaba a mi lado y me salvo de la tortura.

-Aww es tu hermana?- Pregunto mientras acariciaba el pelo de mi hija con una sonrisa falsa.

-No, es mi hija- dije mientras guardaba las cosas para irnos rápido.

 -Ohh no se parece a ti- hizo una mueca y quito sus asquerosas manos de mi pequeña

-Tu vas a una fiesta de disfraces?- Pregunto curiosa mi hija.

-No, aun falta para halloween, ¿Porque?- Dijo mientras se acomodaba su pelo.

-Ahh es que parece que estas vestida de bruja- No pude evitar reírme ante el comentario de mi hija.

-Que grosera, ¿Eso te enseña tu Mamá?- Estaba con la cara roja y se notaba que estaba muy enojada.

-Nop, mi papi me enseño eso- Tomo mi brazo y hizo una señal de que ya se quería ir.

-Si bueno ya es hora de irnos- Tome la bolsa de princesas y estaba dispuesto a irme pero la chica me tomo del brazo.

-Toma, este es mi numero por si te aburres de tu esposa- Me entrego un papel y se fue sonriendo.

-Te compro un helado pero no le digas nada a tu madre- Le dije a mi pequeña mientras nos acercábamos al puesto de helados y tiraba a la basura ese papel.

-Trato hecho pero que sea de chocolate y chispitas- Siempre que hacia algo malo, como olvidar algo importante o cuando rompía alguna cosa, tenia que sobornarla para que no dijera nada.

Después de comprar los helados y un juguete que me pidió después, llegamos a casa y ella corrió a buscar a su mama gritando algo que a mi no me agrado mucho.

-¡¡Mamaaaaaaaaaaaaaa!! a  papa le coqueteo una bruja y ella le dio su numero- Me dejo aturdido de lo fuerte que grito.

-¡Te compre un helado y tu juguete!- ¿En serio me estaba delatando?

-Pero no mi silencio- La comencé a perseguir por toda la casa hasta que se escondió atrás de su mamá.

-Es mentira lo que dice cariño, si le efecto que se me cayera de bebe- Ella me miro raro ya que no sabia eso pero seguramente en unos minutos ya era hombre muerto.



𝓞𝓷𝓮 𝓼𝓱𝓸𝓽𝓼 𝓒𝓓𝓜 𝔂 𝓔𝓵𝓭𝓪𝓻𝔂𝓪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora