Diecisiete

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Nos pusimos a ver una película y a comer la pizza que Mario había dejado, a mitad de película entró Rubí con una charola
Rubí: Aquí están sus cosas- dejo la charola sobre la mesita que está en frente de mi sillón
Cara: Puedes pasarnos las cosas por favor? No nos queremos levantar- de mala gana Rubí nos pasó las cosas y luego se retiró.
La noche pasó divertida, terminamos la película, comimos, nos pusimos mascarillas, nos arreglamos las uñas, chismoseamos y al final quedamos dormidas las 4 en mi cama, ya que era grande
*Ak día siguiente*
Desperté por la luz del sol que entraba por mi ventana, note que alguien me abrazaba como a un peluche, intenté girar pero tenía una pierna encima de las mias, vi el brazo que me abrazaba y note que llevaba una pijama blanca con ositos verdes...era Oriana, su enterizo era inconfundible
Cara: Ori ya sueltame, me quiero bañar
Ori: Amm?
Cara: Qué me sueltes niña!- levante un poco la voz
Ori: Ash, ya, vete- me soltó
Me levante de la cama y me estire, vi a mis amigas durmiendo muy plácidamente, preferí no despertarlas así que entré a la ducha, tarde 15 minutos y cuando salí las muy flojas seguían durmiendo.
No tenía planeado salir hoy así que me puse esto:

Sujete mi cabello en una coleta y no me maquilleSalí de mi habitación y me dirigí a la cocina, cuando entré vi Liz haciendo el desayunoCara: Buenos días Liz- le di un beso en la mejillaLiz: Buenos días mi niña ¿te sirvo el desayuno? Cara: Si, por ...

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Sujete mi cabello en una coleta y no me maquille
Salí de mi habitación y me dirigí a la cocina, cuando entré vi Liz haciendo el desayuno
Cara: Buenos días Liz- le di un beso en la mejilla
Liz: Buenos días mi niña ¿te sirvo el desayuno?
Cara: Si, por favor, tengo mucha hambre- sobe mi estómago
Termine mi desayuno y me dirigí a las gradas, de pronto senti unas manos en mi cintura
Mario: Me debes algo- susurro en mi oido
Cara: Creo que no- trate de subir pero el hizo que girara
Mario: Claro que si- empezó a besar mi cuello e hizo que rodee sus caderas con mis piernas, me apretó el trasero y me llevó a su habitación. Me tiro a la cama y se desiso de mi corto, metió su mano dentro de mis bragas y empezo a masajear mi parte, yo gemi y él siguió besando mi cuello
Cara: Ah Mario... Mmm...ya casi...- me mordí el labio
Estaba apunto de llegar al orgasmo pero Mario dejo de masajear mi parte, se levanto y me vio con una sonrisa
Cara: Qué te pasa?- pregunte molesta
Mario: Así me dejaste tú anoche linda, estamos a mano- me guiño un ojo y salio de su habitación
Cara: Estupido!- grite y me puse mi corto...

EL CHICO DE INTERCAMBIO (MARIO BAU) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora