Eran las seis de la mañana yo estaba durmiendo en mi cuarto y mi mamá toca la puerta y despierta gritando mi nombre diciéndome que ya era tarde y que si esta vez llegaba tarde a la escuela me mataría y yo tenía planes para este fin de semana y no correría el riesgo .
-¡Ya te levantaste!-gritó mi mamá por segunda vez desde la cocina
-¡SI MAMÁ! ¡YA ME LEVANTE!- grite a todo pulmón..... tome una rápida pero buena ducha y me cambie en solo cinco minutos.
-Buenos día mamá - ella estaba preparando el desayuno rapidamente para que yo no llegase tarde a la escuela otra vez aun que quedara a cinco cuadras mas allá de mi casa – que no me vas a saludar
-Perdóname hijo es que no tengo mucho tiempo, comete esto rapidamente esto o llegaras tarde otra vez y ya no querrás saber lo que te pasara así que apúrate –dijo mi madre en un tono autoritario.
-Tome un pan y salí de mi casa un tanto molesto –Ya mamá ya me voy cuídate
-ok espero que todo te vaya bien y pobre de ti que me entere que has faltado una vez más pobre de ti –dijo mi mamá frunciendo el ceño y yo cerré la puerta y me fui -
-Estaba caminando y esta un señor con un carrito de dulces –Me da un cigarrillo – él y lo saco cuidadosamente para entregármelo y yo solo lo acepte – gracias. Tiene un encendedor – y él lo saco y me lo dio – gracias de nuevo-volteé y ahí había un chico para con una cara de inocencia con unos lentes oscuros era alto pero no más que yo tenía pelo castaño era blanco piel de porcelana y unos hermosos ojos azules cielo me acerque a el rapidamente para que no se fuera y le salude – Hola soy– acto seguido le tendí la mano y le guiñe el ojo
-Eh…..hola– me dijo con una pisca de nerviosismo en su voz.
-Soy Harold – me presente ante él – pero todos me llaman Harry
-Louis –dijo con nerviosismo y por fin me tomo la mano y me la apretó suavemente pero yo se la apreté dura moviéndola muy rápido.
El bajo la cabeza y trago saliva muy ruidosamente yo agache mi cabeza y mire una dura erección entre mis -Te gusto lo que viste – dije con un poco de atrevimiento, y el volvió a tragar saliva –Lo tomare como un sí– concluí
-Ah! Y espero que tragues otra cosa aparte de saliva –Io tome de la mano y lo jale lentamente-
-Vamos – le dije
-¿Dónde?–dijo nerviosamente
-A un lugar que te va gustar muchísimo
