Capítulo 1: El comienzo.

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Ciudad de México

Era el día, después de haber logrado por fin tener un día libre de prácticas en el hospital y de organizar sus trabajos, tareas, y demás, por fin había llegado el día en el que Katherine conocería a su grupo musical favorito; había un mar de emociones dentro de su estómago, se encontraba nerviosa, emocionada, y sobretodo algo asustada por alguna razón.

Apenas inició su día, Kath se levantó lista para una gran mañana, prendió la cafetera, saco el conjunto elegido para el evento y disfrutó de una ducha cantando a todo pulmón canciones escritas por el grupo al que estaba a unas horas de conocer;
Cuando salió de la ducha dejo que la canción "En un solo día" llenara su habitación mientras se sentaba frente al espejo para comenzar a arreglar su cabello, este solía ser presentado ante la sociedad como un despeinado moño rubio debido a que en sus prácticas profesionales era mucho más cómodo así, sin embargo, ese día era especial y Katherine quería honrarlo hasta con su peinado, por lo que se esmeró en dejar que sus ondas naturales secaran al aire después de haber puesto sus correspondientes productos capilares.

Katherine Mares era una estudiante de medicina a punto de concluir sus estudios y recibir su título como doctora, no solía ser una mujer extravagante, era más el tipo de chica que prefería salir con jeans y blusas holgadas cuando no traía puesto el uniforme del hospital donde hacía sus prácticas finales. Un dulce bálsamo siempre la acompañaba con una dulce sonrisa, y la caracterizaba la pasión con la que hacía todo aquello que emprendía.

Apenas salió de su casa, nuestra chica se dirigió a una tienda cercana por el regalo que con meses de anticipación había comprado para uno de los integrantes de la banda: Juan Pablo Villamil, el chico que estúpidamente (palabras de Katherine) la tenía en la luna desde hacia meses. La verdad era que Kath no solía ser el tipo de persona que compraba regalos a desconocidos, aún si esos desconocidos eran parte de su banda favorita; ella prefería mantenerse más al margen, justamente ese día la aterraba la idea de que Villamil o alguno de los otros integrantes de la banda subieran algo a sus redes identificando el regalo de Kath con su persona, por eso el obsequio no llevaba más que un ligero corazón como firma del destinatario.

Volviendo al punto, Katherine nunca había sido identificada como una fan de las que se enamoran de sus ídolos, pero Juan Pablo Villamil había logrado robarle más de un suspiro y más de una sonrisa, por eso había comprado aquel presente para el cantante,quizá era una forma de decir "gracias por la compañía hecha música", de todas maneras por eso había hecho espacio en su agenda para ir a conocer a la banda en persona, por eso y por sus mejores amigas claro, que habían amenazado con armar un gran escándalo la siguiente vez que se vieran en persona, y cuando su amiga Daniela usaba palabras como "gran" y "escándalo" en una misma frase había que tomarla enserio.

Al tener todo listo el camino hacia el auditorio donde la presentación de la banda era comenzó, y Kath podía ser sincera consigo misma para admitir que los nervios parecían ir creciendo de a poco en poco, y que ni siquiera sus canciones favoritas parecían ayudar, pero entonces su celular vibró y una sonrisa se formó de nuevo en sus labios.

Mensaje
Daniela
¡Estoy aquí!
¿Donde estás?
Seguro vienes tarde.
Te mataré si llegas tarde.

La rubia no pudo evitar rodar los ojos mientras respondía al mensaje de su amiga.

Mensaje
Katherine
¿Eres consciente de que yo no soy quien está manejando el autobús?
Dame 5 y estaré ahí para patear tu trasero.

Mensaje
Daniela
Que sean 4 y tenemos un trato.
Ya veremos quien patea a quien.
Aquí te veo rubia.

Una risa surgió desde el interior de nuestra chica mientras el recuerdo de sus dos mejores amigas le venía a la mente; la primera, llamada Daniela, era una chica extrovertida que constantemente proponía las más grandes locuras, una leal seguidora de todas las ideas que sonaban algo descabelladas, el tipo de chica que era leal hasta la muerte, por ende, el tipo de chica también con la que no te convenía tener una enemistad o una pelea. Tenía una maestría en lenguas extranjeras, se dedicaba a dar clases de distintos idiomas en un instituto multilingual, y aún así era prácticamente la que más tiempo libre tenía en el grupo de amigas, era ella la que que planeaba las salidas grupales, los viajes juntas y las pijamadas.

Nuestra Historia.- Juan Pablo Villamil Donde viven las historias. Descúbrelo ahora