1. Dimensión Espejo.

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En la sagrada línea del tiempo del multiverso existen dimensiones paralelas, conocidas como dimensiones espejo pero estas eran una singularidad excepcional creada por un incidente sin precedentes, haciendo que una dimensión se fracture, creando una alternativa. Muy pocas veces se presentaba esta singularidad en algún universo, pero el séptimo universo tenia una de estas dimensiones siendo una copia casi exacta de la original.

En esta dimensión la tierra era un planeta rebosante de vida, con muchas especies de seres vivos, pero el planeta murió por el ataque de un saiyajin, una raza de guerreros cuyo único propósito era conquistar planetas.

La tierra se había vuelto un desierto, ya no había verde, ni azul, todo había muerto, excepto un pequeño ser, una niña que apenas y podía caminar, ella lloraba en medio de los escombros de lo que alguna vez fue su hogar.

Una figura azulada se hizo presente, caminó hasta la niña y la levantó en sus brazos. -- No llores pequeña. -- habló suavemente. El hombre de piel azul hizo aparecer una manta rosa con un movimiento de su bastón. Envolvió a la niña y la arrulló hasta que cayó dormida.

-- Wiss -- Una voz de niño se oyó. El mencionado giró su cuerpo, viendo al recién llegado. La apariencia infantil del dios del todo se hizo presente.

-- Zenosama -- detrás del mencionado habían dos guardias siguiendo todos los movimientos del pequeño.

-- El escapó -- dijo Wiss. -- Ya no siento su presencia en el planeta. -- La pequeña niña chupaba su dedo pulgar con calma. -- Solo se salvo ella. --

Zenosama suspiró. -- ¿Ella es la única sobreviviente? -- Wiss asintió el había explorado todo el planeta, no existía nadie más, cada ser vivió pereció en manos de ese saiyajin de pelo en punta.

-- ¿Qué haremos con ella? -- preguntó el de piel azul.

-- La enviaremos a la dimensión original. -- El más pequeño flotó hasta estar a la altura de los brazos del mayor. -- Esta dimensión agoniza, pronto desapareceremos todos... pero ella aun es pequeña, ella aun tiene un futuro. -- El pequeño dios tocó las mejillas del bebé, esta apenas y reaccionó seguía en un profundo sueño. -- Ella estará mejor con seres vivos de su especie. --

-- Gran Zenosama, abrir una grieta entre dimensiones puede ser contraproducente. -- Zenosama hizo caso omiso a las palabras del mas alto.

-- Ya no importa Wiss, esta dimensión ya no tiene futuro. -- dijo el más pequeño viendo el cielo fracturándose como si de un vidrio se tratara. - Yo pierdo fuerza... pronto dejaremos de existir. - Zenosama suspiró, quien diría que un mortal pudo causar tal desastre. El pequeño dios del todo movió la muñeca abriendo una entrada en forma de avellana, con un tono púrpura plasmático.

Wiss vió con ternura al bebé. -- Espero que encuentres a tus padres en esa dimensión. -- Wiss movió su bastón y alrededor del pequeño cuello del bebé apareció un collar, este tenia una piedra multicolor incrustada a un ovalo de oro, tras del objeto estaba escrito el nombre de la niña. -- Gine. --
Zenosama creó una burbuja de protección que envolvía a la dormida niña, acercó la burbuja al portal y dejó que el plasma de la entrada la absorbiera llevándosela a otra dimensión.

--Espero que puedas ser feliz en ese lugar. -- Wiss puso una mano en su pecho preocupado. -- ella es tan pequeña. -- un estruendo proveniente del cielo los alertó, las grietas se hacian cada vez mas grandes y los brazos negros de la energía oscura se colaban por ellas, quedaba muy poco tiempo.

--Estará a salvo. -- dijo Zenosama apresurado, extendió las manos hacia el portal que había abierto . -- No todo lo que pasa en esta dimensión se refleja en la original. La tierra aún vive en esa dimensión.-- El portal parecía cerrarse con el poder del pequeño dios, pero abrir un puente entre dimensiones era mas peligroso de lo que se podría pensar, la debilidad de Zenosama y el inminente fin de esa dimensión estaban dificultando cerrarlo, Zenosama comenzó a preocuparse al ver que la grieta se resistía a su poder.

El portal comenzó a crecer en desmedida, Wiss y Zenosama usaban su poder para contener la energía oscura que se colaba por esa entrada. Zenosama hizo un último esfuerzo por aumentar el poder que le quedaba y en combinación con el poder de Wiss la entrada comenzaba a ceder.

El dios del todo y Wiss perdían color, su vitalidad se perdía a medida que la dimensión se fracturaba pero debían resisitir, seria peligroso para la dimensión original dejar abierta una puerta, la grieta comenzó a encogerse, pero al estar tan concentrados en esa labor no se percataron de un individuo que se acercaba. El saiyajin había observado desde lo lejos como enviaban a su última víctima a otra dimensión, una dimensión lista para ser aniquilada.

El villano voló hasta la entrada y cruzó al otro lado justo a tiempo pues luego de entrar en el portal se cerró ante la mirada atónita de Wiss y Zenosama.

-- ¡No puede ser, el escapó! -- El de piel azul gritó de horror y frustración pero Zenosama guardó silencio.

-- Cruzó, pero no llegará igual al otro lado. -- Wiss lo observó. -- Esta herido, quizá muerto, la energía oscura lo envolvió. Wiss suspiró aliviado era una pequeña brecha de esperanza, la energía oscura podía hacer mucho daño y esperaba que el saiyajin hubiera muerto en su intento de cruzar a la otra dimensión.

El cielo retumbo, la tierra se partió e implosionó junto con la dimensión espejo, toda la vida paralela que se creó hace millones años atrás había dejado de existir, tal destrucción se vio como un diminuto destello en los ojos de Daishinkan quien revisaba las esferas contenedoras de los universos.

- ¿Mhhh? - dijo el gran sacerdote confundido. - ¿Qué habrá sido eso? -

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El cielo de la capital del oeste se vio iluminado por una luz intermitente, se pensaba que era un comenta, o una nueva nave de la Corporación Capsula, pero la luz parecía tener vida, se movía zigzagueando sobre la cuidad, como si buscara algo , por fin se detuvo en un edificio algo viejo con un gran cartel de luces neón amarillo "Orfanato"

La luz desapareció, dejando ver una burbuja traslucida que contenía algo. La esfera bajó lentamente hasta la puerta del lugar donde se disolvió dejando a la pequeña niña que aun dormía. Era media noche no habían muchas personas rondando por aquella calle, excepto una mujer, vestida de ropa desgastada, pasaba por el lugar cuando escuchó un pequeño llanto. Era una niña, una linda niña que parecía ser un regalo del cielo hacia ella.

El cielo se volvió a iluminar, ahora una estela de luz purpura cruzó rápidamente por la cuidad, nadie la vio, nadie escuchó el impacto en el frondoso bosque, otro ser, parecía ser un niño, vestía un uniforme saiyajin. Aquel villano de la otra dimensión había cambiado, era un niño de nuevo, sin recuerdos, sin poderes y grandes cicatrices oscuras que palpitaban en cuerpo y cara. No había que temer con un cuerpo tan dañado era imposible tratar de concluir una venganza que no recordaba.

Amor Entre Dimensiónes [VegeKaka]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora