✿Una última despedida•7✿

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Me levanté al día siguiente, me miré al espejo; tenía cara de muerto, ya que había estado llorando.

Miré la hora con cansancio, las 12:34 am....

Me dirigí al armario con pesadez, y me puse un traje arreglado negro...Hoy le daría una última despedida...

Me lo puse y bajé al salón.

Era sábado, lo cuál indicaba que no había que ir al instituto, por suerte...No tenía ganas de que nadie me mirase la cara, ni yo mirar la cara a nadie.

13:45...Miraba por la ventana con ojos cansados y mirada perdida, estaba lluviendo a cántaros.

«¡Genial~!» pensé. Como si no tuviese suficiente, va y empieza a llover...

Últimamente estoy enfadado con todo el mundo, sobre todo cuando me preguntan; ¡¿Por qué se meten en mi vida?!

Ahg...Me aburrí de estar mirando la fría y mojada ventana y pensando en por qué a mi me tenía que salir todo mal, y decidí salir, si, aunque estuviese lloviendo.

Salí al jardín, la lluvia fría mojaba mis cabellos color ceniza...

Me sentí libre...Respiré hondo, miré al cielo y cerré los ojos, dejando que gotas cristalinas mojasen mi cara y corrieran por mis mejillas, como lo habían hecho anteriormente mis lágrimas...

Me quedé así un tiempo, no sería capaz de decir cuando, pero me sentí que las cadenas que me ataban anteriormente ya no estaban.

Palpé mi ropa, estaba empapada y helada, pero no me importó.

Abrí los ojos y vi como las nubes se disipaban y dejaban a la vista un sol, que brillaba como nunca.

Los rayos de éste me acariciaban el rostro. Decidí entrar en casa para secarme.

Entré con pesadumbre a casa, me desvestí y dejé la ropa secándose.

Arrastrando los pies, me fui donde el sofá y me eché, era hora de comer, pero no tenía ganas, así que fui a buscar una película.

Elegí una cualquiera y miré por la ventana, había tormenta.

Divisé un rayo celeste cruzando em cielo de manera majestuosa, al tiempo que las gotas de lluvias se agolpaban contra el cristal sonando con un tintineo.

Me puse a ver la película y al cabo de un rato me dormí, soy así, me aburro con algunas películas.

Me desperté aturdido y miré la hora, eran las 19:56....

Me levanté y fui a por mi traje, que en efecto, ya estaba seco, por suerte.

Esperé a que fueran las 20:30, para coger un paraguas y salir.

Sentía en mi un sentimiento: miedo.

¿Y por qué miedo?

Creo que por lo que me iba a encontrar, o la idea de no volver a ver sonreir a Rosie...

De repente, mi corazón a mil, se me encogió.

Sacudi la cabeza para alejar esos pensamientos de mi mente, me dolía la verdad, pero así tenía que ser.

Mientras caminaba, observaba mi alrededor, una calle solitaria y fría.

Ni un alma por la calle, normal, con el chaparrón que caía, nadie ha salido.

Después de un rato, sumergido en mis pensamientos, llegué.

Fuera me esperaba Gabi, con cara de gran pesar;

Gabi:Hey~ Lo siento...-dice al momento que me abraza-¿Cómo estás?

Ricc:Bueno, podría estar mejor, pero estoy aprendiendo a acertar la realidad, que es la que es.

Victor:Por mucho que llores no va a volver-aparece de la nada, negando con la cabeza-No te reprimas por ello, seguro que no querría verte triste-encogiéndose de hombros-.

Ricc:Si, supongo que si-cerrando el paraguas y, entrando con el corazón en un puño, acompañado de Gabi y Victor-.

Entramos con gran pesar y me acerqué a donde estaban los demás del equipo y la familia de Rosie, a los cuales, les di el pésame.

También le di el pésame a Mikel, aunque me cayese mal por todo lo ocurrido, no podía evitar sentirme mal, al fin y al cabo era su novia.

Me acerqué a donde estaba el ataúd. Los ojos se me cristalizaron, se me llenaron de lágrimas, las cuales estaban a punto de correr desesperadas por mis mejillas dejandolas húmedas.

Noté que tenía un nudo en la garganta;

Ricc:A sido una gran perdida para todos...-dije con ronca, dejando que mis mejillas se mojasen por miles de lágrimas-.

Arion:Si, pero seguro que nos estará viendo desde donde esté y velando por nosotros-musitó Arion, a lo que yo respondí asintiendo-.

El resto de la tarde, bueno, me duele narrarla, así que la resumiré; El resto de la tarde transcurrió, en siliencios llenos de pesar, lágrimas silencionas, llantos callados y gritos inaudibles.

Miré la hora, eran las 21:57.
Pensé que sería ya mejor que me fuese.
Miré por última vez el ataúd donde descansaba mi amor, ahora platónico, o, casi imposible, pero seguro que me está viendo, desde un lugar, el cual no se. Pero no me importa, porque la llevaré siempre en mi corazón.

Sonreí tiernamente para mi mismo, me acerqué y dejé una rosa rosa...Rosie...Descansa~

Y me fui de aquel lugar con una mezcla de tristeza y pesar, que fueron reemplazados por ternura, al pensar en que Arion puede que tenga razón; que estará velando por nosotros. Nuestro angel protector...

Mi ángel.

Llegué y me fui a mi cama, pensando, en que al fin y al cabo el día no había sido triste del todo viéndolo por la parte positiva...

Decidí no comerme la cabeza más pensando, era hora de dormir.
Y eso hice, me quité la ropa y me puse mi pijama. Pero antes de echarme en mi cama, miré el cielo.
El cuál se pintaba de hermosos tonos rosados y morados.

Dejé que una lágrima recorriese mi mejilla. Puede que la lágrima llevase con ella algo de tristeza, pero para mi era de felicidad, porque Rosie podría descansar tranquila...Podría descansar en paz...

«''Le dije que me diera tan solo un día, y me dio más, puede que no consiguiese cumplir, pero ella si lo hizo~''»

Buenas noches Rosie~

Y me eché en mi cama y conseguí conciliar el tan anelado sueño.

«''Rosie...''»

''«✿Tan Solo Dame Un Día✿»''[Riccardo Di Rigo]•[IEGO]✿#1✿Donde viven las historias. Descúbrelo ahora