SOULMATES 4 || Derek Hale

Prólogo.

(N/A) Solo quería decir que alteraré la línea de tiempo un poco más, así que la cuarta temporada tendrá lugar un año después de la tercera, no puedo decir el por qué ya sería un gran spoiler O.O . De todas formas, este no será el último año de secundaria del grupo. 

~~~

                Scott, Stiles, Lydia y Destiny ingresaron a la veterinaria de Deaton, con pasos apurados mientras el corazón del primero latía casi tan rápido como el de la joven.

-¿Hace cuánto tiempo sucede esto?- Preguntó Stiles.

-Semanas. Lo he buscado por toda la ciudad, pero no aparece.- Le respondió Destiny, pasando una mano por su cabello, frustrada.

-Tampoco ha respondido ninguno de mis mensajes.- Agregó Scott.

-¿Derek contestó tus mensajes alguna vez?- Preguntó Stiles.

-Una vez...-

-Como sea, ese día trabajaba en un caso con papá y cuando regresé al loft Derek no estaba, creí que se había ido a alguna parte, pero entonces encontré esto...- La mujer tigre dejó un cartucho de bala sobre la mesa.- ¿Ven el símbolo?-

-¿Qué significa?- Preguntó Scott.

-Es el escudo de un clan de cazadores en México, los Clavera. Lo que no sé es por qué quieren a Derek.-

-No creen que lo hayan asesinado, ¿Verdad?- Preguntó Stiles.

-No lo sé.- Suspiró ella, para después girarse a Lydia.- Por eso necesitaba tu ayuda.- Destiny pasó el frasco donde guardaba los cartuchos a la Banshee.

       Ella apretó los labios mientras sacaba el contenido del frasco, concentrándose en sus presentimientos, con la esperanza de obtener la ubicación del hombre lobo. Entonces, dejó caer los casquillos sobre la mesa de metal, inclinando su cabeza para oír mejor.

-¿Qué? ¿Está muerto?- Preguntó Stiles.

-No.- La mujer tigre suspiró aliviada.- Pero tampoco estoy segura que esté vivo.-

-¿Qué significa eso?- Cuestionó el Alfa.

-No lo sé. Hay algo que no está bien, es solo que... no lo sé.- Lydia se disculpó con la mirada.

-Está bien, Lyds, al menos sabemos que sigue con vida.- Aseguró Destiny.

-¿Y cómo vamos a encontrarlos?-

-En México.- Le respondió a su hermano.

-Bien, saldremos esta noche.- Decidió Scott.

-¿Qué? No, ustedes se quedarán aquí. Es muy peligroso.- Contradijo la mujer tigre, pero, como era de costumbre, nadie le hizo caso.

-No irás sola.- Sentenció el humano.- Todos iremos.-

-Está decidido.- Finalizó Lydia.