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—¿En cuanto tiempo llegará Jimin?

—No debe tardar mucho.

—¿Estas segura?

—Muy segura.

—Tenemos que hablar Sook Ji.

—Se de lo que quieres hablar y sabes que aún no es el momento, aún no puede saberlo, no quiero hacerles daño.

—Él esta preocupado ayer nos encontramos en una cafetería y se veía muy mal, ¿No quieres hacerles daño? Dice lo ahora, si no después su sufrimiento será peor.

—Tu bien sabes cuanto amo a Jimin, yo no quiero lastimarlo.

—Yo lo se —la abracé —pero es mejor que lo hagas, no lo atormentes más.

—Te juró que lo haré. Pronto.

Nos encontrábamos en casa de los Park, Sook Ji nos había invitado a cenar. Después de nuestra plática, Jimin llegó, durante la cena pude notar cuanto ama Jimin a Sook Ji, y lo doloroso que les resultará saber lo que esconde Sook Ji.

Las niñas se habían ido a jugar al cuarto de juegos de Ji Hyun, y nosotros bebíamos una copa de vino blanco en la sala de estar.

—Sun Hee, ¿Puedo hacerte una pregunta?

—Ya las has echó —reímos.

—No seas boba, por favor estoy curiosa.

—Bien... Dime.

—¿No has pensado en rehacer tu vida amorosa?

—¿Qué? —entrecerré lo ojos.

—Buena pregunta yo también me lo he preguntado.

—Pues que chismosos —bebí de mi copa.

—Anda responde —me animó Sook.

—Bueno... No lo he pensado realmente.

—¿Por qué no? O sea eres muy guapa, debes tener muchos hombres a tu alrededor —negue —puedo presentarte a alguien, ¿Qué piensas de Ho Seok?

—¿Mi hermano?

—Gracias Jimin, me gusta Ho Seok... Pero no de esa forma. Creó... Que si tengo que rehacer mi vida lo haría con alguien que igual sea divorciado —mire a la nada —Si definitivamente con alguien divorciado.

—¿Por qué? —Jimin me miró atento.

—Verás Jimin, creó que es mejor pues ambos ya habremos pasado por el rollo de la decepción amorosa, la costumbre de estar con una persona, la traición, las mentiras... Ya sabes todo lo que conlleva a que te divorcies, entonces así ambos buscaríamos una segunda oportunidad y tratar de no fallar.

—Tienes razón.

—¿Y por qué no con un viudo? —habló Sook.

—¿Un... Un viudo? Yo... Yo no lo tengo pensado —bajé la mirada, sabía a que se refería.

—¿No creés que ellos también merecen una oportunidad? —no quería responder.

—Quizás si, pero aveces el amor que tienen a su pareja fallecida, les es más fuerte y no se atreven y yo estoy bien con eso. Además no conozco a ninguno.

—¿Tu si cariño? —Jimin abrazo a Sook por los hombros.

—Pronto te presentare uno Kwon Sun Hee.

Cruzamos miradas y yo realmente comencé a sentirme mal por Jimin.

No sabía lo que le esperaba.

Papá soltero •JM• (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora