whiplash.

i need u more.

Narra TaeYong;

Escuché eso y no pude evitar reír suavemente, sabía que Winwin diría algo desubicado, ese chino se veía muy inocente pero seguramente se la metía los dedos viendo fotos de Kun toda la puta noche.

Miré a JaeHyun sin vergüenza, el rubio estaba completamente rojo y a pesar de hacerse el "cool" se veía tan nervioso, tan tenso. Pero antes de que él hiciera algo y tardase mil años, decidí tomarlo de la cintura en un intento de acercarlo a mi. Se sorprendió pero no se había resistido a mi agarre. Cuando lo tuve cerca, lo ayudé a acomodarse justo encima de mi entrepierna (por lo que sonreí de forma lascivia) y él de forma algo confusa, pero no desagradable; enredó sus brazos en mi cuello, por ese momento me olvidé del puto juego, de los otros idiotas y me quedé hipnotizado con su inocente carita y con su perfecto cuerpo sobre el mío. "Inconscientemente" acomodé mis manos en la parte baja de su cintura y comencé a moverlo desde la cintura, para que su trasero comenzase a acariciar mi entrepierna de forma suave.

¿Los demás chicos? Me había olvidado completamente de ellos y ahora tenía ganas de llevarme al rubio a algún lado para poder romperle ese buen culo que se traía.

Narra JaeHyun;

Las manos de TaeYong se deslizaban de forma suave y algo traviesa sobre mi cintura ¿cómo mierda habíamos terminado así? Estaba moviéndome encima de su bulto en pleno lugar público y juro que pude sentir como una erección crecía debajo de mi trasero y como era de esperarse, yo comenzaba a excitarme.
Me puse completamente rojo (más de lo que ya estaba) y mis movimientos cada vez se hacían más sensuales, provocativos ante aquél hombre que me había enloquecido desde que lo vi.

- Mhgnñ, TaeYong.

Susurré por lo bajo, cerca de su mejilla. Y a los pocos segundos me dí cuenta de donde estábamos, con quienes estábamos y a plena luz del día ¿que carajo? ¿como mierda TaeYong podía ser tan irresistible? Tan encantador, tan él, su aroma, su tacto.

Pero no, no podía seguir aquello, no en ese lugar, por más que lo deseaba y demasiado. Me levanté de un momento a otro y no miré a nadie, ni siquiera pude verle la cara a aquél chico que hasta hace unos 3 segundos atrás, estaba refregándole mi culo encima.

Me fui corriendo, estaba rojo, muriendo de vergüenza por aquél comportamiento mío. Nunca más volvería a hablarle, estaba realmente apenado.

Llegué a mi departamento luego de caminar una hora, dejé mi mochila en el suelo cerca de la puerta y suspiré mientras me arrastraba a mi habitación para tirarme en la cama boca abajo, correcto, aún no podía superar lo que había hecho, pero no me sentía mal, sentía ganas y deseos de tener a TaeYong conmigo en ese momento.

Me volteé en mi cama, miré en techo y un aroma ajeno comenzó a invadir mis sentidos, un aroma que había sentido hace horas atrás, allí, con TaeYong sosteniéndome. Y volvió a mi mente la forma tan suya de tocarme, como me movía en su regazo, sus manos, joder, si lo deseaba antes, ahora estaba muriéndome por él y haría lo que fuese para tenerlo para mí.