Recuerdo la primera vez que te hable, tú ibas más que nada por Alex (Mi mejor amigo). El me contó que habían hablado un par de veces por internet, que se iban a conocer en el café que estaba contra esquina del colegio y me pidió que lo acompañara, él decía que eras una chica ordinaria, no eras bonita, ni fea, eras "normal".
Pero, vaya que Alex es ciego, porque eres la más hermosa criatura que ha pisado esta tierra. Cuando te vi entrar por esa puerta, con tu pelo amarrado en una coleta, tus hermosos ojos avellana, tus labios rojos como la sangre y tu bella tez que parecía de porcelana, tenía miedo de que si te tocaba te romperías.
Saludaste tan tímida, se notaba de alengua tu inocencia, fuiste súper amable, súper divertida y radiante. Me di cuenta de rato que no habías dicho tu nombre, supongo que no lo hiciste porque pensabas que Alex ya me lo había dicho.
Te pregunte.
Tu nombre era Ginevra, pero preferías que te llamaran Ginny. ¿Sabes? Nunca tuve la oportunidad de decirte que tenías un bello nombre, tan bello como tú. Te dije el mio, "Daniel".
Sonreíste, yo caí rendido a tus pies.
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Época
Short Story¿Has oído la frase de "Todo tiene un inicio y un final, nada dura para siempre"?, ¿no? Yo si, muchas veces a decir verdad. Pero esto era una excepción a eso. Esto no tiene un inicio o un final, es y será eterno.
