Diez

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Oh esplendor otoñal que me invade de añoranza, has llegado puntual como siempre este año.
¿Quieres que te invite una taza de té?
Vamos, ven y siéntate conmigo a observar las hojas que se tornan en colores rojizos para después caer al suelo y ser pizoteadas por los infantes. Ven, quiero hablar contigo sobre las cosas que nunca hice y de las que no obtendré cosecha alguna por su inexistencia.
Otoño, tómame de la mano para sentir tu calidez solo un rato antes de que te marches y me dejes con el frío del invierno.

Poesía de un joven corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora