Era un día soleado acompañado por una suave brisa, a pesar de ser invierno. Ese tipo de climas le fascinaban a Jimin.
Él decidió que no quería dejar ese día pasar soll, quería disfrutarlo con alguien más. Para su "sorpresa" YoonGi estaba libre.
Más bien, YoonGi siempre estaría dispuesto a salir con Jimin.Salieron rumbo al mismo destino de siempre, un parque donde la naturaleza resaltaba en su máximo esplendor.
En aquel parte abundaba la sencillez de una hermosa vista. Había árboles, todo tipo de arbustos, un sin fin de césped bien cortado y que hacía única la estadía allí.Decidieron caminar hasta encontrar un característico árbol de cerezo, el cual desprendía flores que recién se presentaban.
Se sentaron en una banqueta color blanco, tenía una vista formal y cómoda, parecía sacada del jardín de algún reino. Justo, arriba de aquel banco, se tenía una vista directa del cerezo.
YoonGi estaba absorto por la perfección que demostraba aquel árbol, por lo que decidió captar ese momento con ayuda de la cámara de su teléfono móvil, apuntando al árbol desde la perspectiva donde el se encontraba sentado.
Hasta que una llamativa voz y una pequeña mano tocando su hombre con el fin de llamarle la atención hacen que YoonGi se de la vuelta y quede frente a frente con el contrario.
–Hyung... ¿Sabes? Estaba queriendo decirte algo desde hace tiempo –dice con voz suave, mostrando su timidez–.
Este día tan perfecto y este hermoso ambiente me obligan a querer decírtelo ya –.–¿Qué es? Sabes que puedes decirme lo que quieras, Jiminie. Coincido en que estas circunstancias quizá sean las adecuadas –su respuesta resaltó seguridad ante el menor–.
Jimin respiró hondo, aún mirando al contrario a los ojos. A pesar de estar nervioso, sentía las inmensas ganas de no dejar pasar ese momento... Se sentía, de alguna forma, seguro. Pues, llevaba mucho tiempo imaginando una escena como la que estaba viviendo en el allí y ahora.
–Me gustas, Hyung. Estoy... enamorado de tí –Recitó Jimin, colocando su mano sobre la del contrario y atrayendo la misma a su regazo.
El mayor se había impresionado en un principio ante las palabras de Jimin, pero se sentía más aliviado sabiendo que no era el único con ese sentimiento guardado. Le estaba agrandando la forma en como las cosas se estaban dando.
–Jimin, mi pequeño –dijo acariciando con el pulgar la suave mano que se encontraba enlazada a la suya– tengo que decirte que... el sentimiento en mutuo –una sonrisa inconsciente se posó en los labios de YoonGi–.
Ambos se miraban, comiéndose en silencio, alimentando esa aura de amor que estaba establecida en sus corazones hace tiempo.
Jimin baja la mirada por unos segundos, contemplando la unión de sus manos entrelazadas, ese reconfortante calor que se desprendía de esa unión agrandaba el corazón del menor.– Jimin...
Ni bien el menor levanta con cuidado su mirada hacia el mayor, sus labios se sellan en un beso, un beso anhelado e imaginado por mucho tiempo... Un beso que ambos necesitaban. Un beso que les curaba el alma.
Jimin lleva sus manos a la nuca de YoonGi y, con suavidad, lo atra más hacia el, juntando más aquel gesto de amor.
Al separarse, no dejaban de sonreírse tímidamente, el mayor toma suavemente los hombros de Jimin y lo atrae a él, uniendolos en un pequeño abrazo. Un abrazo que demostraba como sus almas se sentían: enlazadas.
Aquel amor incondicional terminaría siendo protagonista de una hermosa pareja. Forjada por consecuencia de aquel gran árbol de cerezos. Aquel hermoso árbol de cerezos.
ESTÁS LEYENDO
Flor de Cerezo [YM]
ContoLos enamorados tienden a confesar su amor debajo de estas bellas flores... ▷Personajes: YoonMin (BTS) ▷Three Shot