Capítulo 3: ¿Quién es él?

6 0 0
                                    

Harry había pasado ya más de dos meses siendo amigo de Michelle y por sobre todo soportando los golpes y burlas de los demás, Michelle lo defendía tanto cómo podía, pero no bastaba, apenas se alejaba el recibía un golpe o una burla de parte de cualquiera de sus compañeros, ahora estaba en el baño de hombres, pensando en todo eso mientras se lavaba las manos, pero entonces escuchó la puerta, el séquito de Karen entró y lo miraron, de nada servía correr pensó para si mismo y solo se quedó quieto mientras veía cómo se acercaban a él, le dolía que todo fuera solo por su orientación sexual ¿era tan malo que su mismo sexo lo atrayese? ¿acaso era su culpa? Un día un chico le gustó por encima de una chica y eso había desmoronado todo.

—Mira nada más, el pequeño homosexual, ¿qué le haremos hoy muchachos?

—Yo digo que lo golpeemos.

—Mejor metámoslo al inodoro.

—Yo tengo una mejor— dijo alguien apoyado en la puerta, todos lo miraron y este salió de las sombras, su cabello castaño se hizo visible, este los miraba serio y Harry sentía como su corazón iba a romperse, Gabriel, el único chico del que se había enamorado lo iba a golpear.

—Gabriel... Bien ¿qué propones?— este empezó a caminar hacia Harry, que parecía un niño a su lado, lo miró entrecerrando los ojos y entonces se giró hacia el grupo y dijo:

—¿Por qué no lo dejan en paz, en vez de su falso intento de hombría al golpear a alguien diferente?— todos se quedaron sorprendidos de su respuesta, incluso Harry.

—Muévete Gabriel o te moveremos.

—Quiero ver que lo intenten— Gabriel no tenía un físico tan exorbitante cómo ellos, pero era mucho más alto y por sobre todo con más inteligencia, uno de los matones empezó a correr hacia él e intento golpearlo, pero parecía que Gabriel predecía los golpes al moverse rápidamente y esquivarlos, dio un rodillazo que sacó el aire de los pulmones del matón, los otros dos restantes se miraron y empezaron a atacar juntos, Gabriel iba bien hasta que los dejó en el suelo, pero el primero al que dejó en el suelo ya se había recuperado y lo había agarrado del cuello, antes de saber que pasaba Harry se había acercado, dio una patada en la entrepierna del chico y este cayó retorciéndose de dolor.

—Vaya... No eres tan débil cómo pensé— dijo Gabriel mientras se lavaba las manos.

—G-gracias Gabriel— este se quedó quieto al escuchar la voz quebrada del chico, Harry no podía controlarse, por un momento se había asustado y ahora lo mostraba en lágrimas. Gabriel giró y sonrió verdaderamente cómo casi nunca hacía.

—No hay de qué Harry— los matones seguían en el suelo, pero no sería por mucho, sin pensarlo Gabriel agarró a Harry de la muñeca y empezó a jalarlo fuera del lugar, al salir caminaron por los pasillos hasta llegar a su casillero— Nos toca literatura, agarra tus cosas— Harry lo pensó unos segundos, más que nada procesando las palabras, reaccionó y abrió su casillero, cientos de notas que decían insultos cayeron, otras estaban pegadas en los alrededores, Gabriel bufó al lado, molesto por lo que pasaba. No le gustaba que la gente fuera maltratada por ser diferente, después de todo, todos eran humanos.

—Y-yo, mejor vete Gabriel, yo limpiaré esto— este lo miró y negó.

—Saca todo, tus libros, cuadernos, todo.

—¿Por qué?

—Tendrán un nuevo hogar, ahora apúrate— al decir esto él empezó a alzar las notas rápidamente, Harry agarró sus libros y empezó a apilarlos, al terminar vio que ya no habían más papeles en el suelo, agarró los libros, pero eran muy pesados y el pobre tenía que doblarse y estar a punto de caer para poder cargarlos, escuchó una risa a su lado y sintió como alguien le quitaba los libros.

—Hey.

—Eres cómo un fideo, ni fuerza tienes para cargar tus libros— dijo Gabriel empezando a caminar, Harry lo seguía de cerca sin perderlo de vista, no entendía porqué lo ayudaba y no lo reprendía con repulsión.

—¿Ya llegamos?— preguntó viendo la hora en su reloj, faltaban tres minutos para que la clase empezara.

—Tranquilo fideo— en ese momento Gabriel paró y empezó a maniobrar para abrir un casillero, este se abrió y Gabriel acomodó los libros y cuadernos de Harry, sacó su libro y el de él con unos cuadernos y cerró con candado.

—Mmm... G-gracias por ayudarme— este asintió y empezaron a correr, al entrar vieron a la maestra girando en el pasillo hacia la puerta, entraron y se sentaron rápidamente, a pesar de las miradas de todos sus compañeros, Michelle los miró y una pequeña sonrisa con un gritito se escapó de su boca, empezó a sacar su cuaderno y su bloc de dibujo poniéndolos debajo de su libro de literatura.

—Buenos días alumnos, hoy avanzaremos sobre la poesía, pero será un tema diferente...— Harry vio una nota colarse hacia él y la agarró para leerla.

"Hey ¿por qué no te vi en el receso? ¿dónde estabas? ¿quién es él? ¿eres el seme o el uke? Yo te veo con cara de uke, incluso tienes la altura"

-Michelle.

"Bien,
1. Estaba con problemas.
2. Baño de hombres.
3. Creía que lo sabías todo.
4. Qué demonios, yo no soy un uke Michelle, deja de usar esos términos conmigo"

-Harry.

"De acuerdo. Voy a matar a alguien hoy. Dejaré de preguntarte, es claro que eres el uke y por último, claro que sé quién es él, es Gabriel el chico malo según todos, sé cuánto mide, cuánto pesa, su talla de pantalón, la edad of course y todo, al igual que sé todo, el punto es que quiero saber ¿qué es él para ti?"

-Michelle. ♥

"¿Cómo sabes todo eso? Pero no importa... Creo.
Él es algo muy importante... Es mi crush desde hace mucho tiempo, eres la única que lo sabe, ahora no grites."

-Harry.

Por Dios Harry— dijo ella sonriendo, de pronto un hilito de sangre bajó por su nariz, esta se limpió y se encogió de hombros al ver la expresión de su mejor amigo— Soy una Fujoshi, ¿qué esperabas?— dijo eso y empezó a escribir en su cuaderno, Harry prestó atención y vio cómo Michelle le pasaba una nota con una sonrisa algo extraña. Harry soltó una pequeña risa y abrió la nota.

"¿Estás más...?"

Harry cerró la nota doblada y sintió su corazón palpitar más rápido, no podía ser, de pronto miró al chico y este sonrió, hizo como si desdoblara un papel imaginario y Harry apartó la mirada, desdobló el papel para salir de sus sospechas y lo vio.

"¿Estás más tranquilo fideo?"

-Gabriel.

——————————

Bueno ché... Esto si no me lo esparaba wey...


*Pero si tú lo escribes wey* Cállate conciencia, cállate.

Ah sí, un aviso...

Yo jamo con el jamón al Gabriel ché, esta bien bueno el chango ché. Y no me malpiensen, ya sé que es del Harry ché.

Me cansé de decir ché, ché, caraspas ché, debo dejar de decir ché, ché... Alv... Bueno pos, volviendo al tema quiero saber algo muy importante...






























¿Si el sol es soloso y la luna es lunosa, por qué el perro cruzó el camino?

Preguntas existenciales, existenciales dije. (Yo les dije que era bien pendeja, ahora e aguantan XD)

Los amo, guiño guiño.

Vale Ronnie.

El Chico De Las NotasWhere stories live. Discover now