Lagrimas y tinta.

Te amo.

No sé como pero te amo. Te amo de la forma más dolorosa que
existe. Te amo tanto que daría mi vida porque estuvieras bien,
porque nada te lastimara, porque a pesar de que no me ames
como yo a ti de todas formas te amare toda la vida. Nunca pense
que me enamoraría y heme aquí con una sonrisa de bobo en la
cara solo porque te vi estabas radiante el día de hoy como
siempre. Pero eso no es nada ya que lo nuestro, si es que hubo
algo, acabo.

Te extraño. Extraño tu sonrisa, la manera en que mencionabas
mi nombre, las bromas que nos hacíamos y tu cara de perrito
cuando querías un chocolate. Extraño que le encontraras tan
dulces salidas a tan amargas dificultades y que a pesar de que tu
mundo se estuviese derrumbando tú siempre estabas ahí para
los demás. Extraño la manera en la que veías la vida siempre con una
sonrisa en la cara y tus ojos mieles mirándome, envolviéndome
en tu mente y memoria. Te amo y te extraño pero yo soy el único
culpable de que hoy no estés conmigo.