Modificando su versión..-

Adaptación parte 2 ~ERDLO~

Supones que no hay otra opción que avanzar hacia esa luz, de hecho no hay otra opción que eso, caminas, pasos lentos, como si el suelo fuera a caerse con cualquier paso en falso que llegaras a dar.

Mientras avanzas escuchas susurros, de hombres, mujeres, niños y niñas, pero uno, logras separar a uno de los demás, este es más profundo, la piel se te eriza, no sabes realmente la razón por la cual sigues avanzando a lo que sea que se encuentre en esa luz, pero avanzas, con el corazón en las a punto de saliese, palpitando una y otra y otra vez a un ritmo que desconocías por completo.

Has llegado al punto donde la luz ilumina una pequeña parte de la nada que te rodea, en el centro hay una repisa, sobre esta, una pistola, 5 balas.

Se ilumina otro punto, y de él provienen sollozos, una silueta se ve en aquel punto, dudas en acercarte o no, al final tu sentido común pierde, ¿Qué más puede dar estando en este punto?

Sollozos y sollozos, escuchas una voz proveniente de aquella persona, se te hace conocida, de hecho hace tiempo que no escuchabas aquella melódica voz.

¿Por qué solloza? Tocas su hombro y esta voltea, si, es ella, ¿o no lo es? Esto es tan confuso, ¿Por qué tiene sangre en su ropa? ¿Qué es lo que acaba de pasar? ¿Por qué llora? ¿Qué hace aquí? ¿De verdad está aquí?

Sus ojos están rojos, la ayudas a levantarse, tiene la mirada baja, pronuncias su nombre
-¿Marisol?

Ella el escuchar que mencionaste su "nombre", alza la vista, sus ojos se torna negros, quitando cualquier rastro de humanidad. Se suelta de tu agarra, te empuja con poca fuerza y corre lejos de ti, estas atónito, no sabes que es lo que pasa, ¿deberías de seguirla? ¿Enserio era ella?

No, imposible, tratas de convencerte de ello, pero entonces aquí hay algo realmente escalofriante, volteas a tu alrededor, ¿de dónde salieron todos ellos?

¿Quiénes son? ¿Qué es lo que quieren? Los cuerpos de personas están parados enfrente de ti, los observas, todos con los ojos negros, al igual que Marisol.

-¡Ayúdanos!-

Escuchas que dicen, sería imposible no escucharlos, no lo dicen, lo gritan, una y otra vez, no aguantas, sientes como su sufrimiento se vuelve tuyo, te pones en posición fetal llevas tus manos a tus oídos, intentando que el ruido de sus llamados paren, pero es inútil, es como si estuvieran dentro de ti, te aniquilan.

Pero ya han parado, ahora están estáticos, todos lo observan a él, la sombra por la cual ahora estas en esta situación deseando salir de ella, se acerca, tu corazón está pero que antes, ahora lo tienes enfrente de ti, no sabes si respirar o aguantar la respiración

-¡Sus muertes serán tu culpa!

De repente grita, te sobresaltas, los cuerpos que te rodean empiezan a acercarse, tocándote, como si quieran arrastrarte a su desgracia.

-¡Auxilio!

Tratas de que alguien te rescate, pero es inútil.

-¡Yáñez! –escuchas una voz lejana a lo que te rodea

Alzas la vista, ahora todo está claro, entre comillas, por supuesto, te levantas, no estás en la habitación, observas a tu alrededor y puedes deducir que estas afuera del edificio, afuera de la vivienda donde ocurrió el suicidio, pero no hay nada de lo que estaba cunado llegaste a la escena del "crimen". No hay cuerpo, no hay pistolas, no hay peritos, nada, solo tú.