Mi Querido Profesor (Adaptada)

Capitulo 75

Cameron  termina de tocar la última nota y todos aplaudimos. Don musical no escribió un discurso para Nash y Amelia, les compuso una canción. Debo admitir que era una canción preciosa. Los Mendes son una caja de sorpresas que jamás deja de funcionar.

Shawn escribió un discurso (aunque sospecho que  no lo escribió, conociéndolo es probable que solo lo haya planeado mentalmente), las palabras que dijo eran hermosas, su voz lo es.

Ha llegado la hora de comer. De un modo u otro me siento ansiosa por acercarme a Shawn. Luce guapísimo hoy, cuando lo vi entrar del brazo de la hermana  de Amelia, creo que se llama Dina, casi me da algo intentando disimular, cielo santo, jamás lo había visto así, va completamente de negro, traje, corbata, camisa, todo. Lo descubrí mirándome durante la ceremonia un par de veces, allí arriba lucía intocable pero a la vez sabía que era mío. Sí, es mío.

Creí que las cosas entre nosotros estarían extrañas, por todo lo que paso ayer, pero no se sienten así, miro a ese chico y me siento bien, cómoda, incluso con todas esas miradas indiscretas que he recibido a lo largo de la fiesta.

Veo a Cam acercarse hacia mi mesa, va conteniendo una risa... creo que al igual que yo se siente extraño al fingir un noviazgo. A mí me reconforta que pronto acabará "sólo esta noche, sobrevive esta noche" es lo que me repito.

Casi me atraganto con agua cuando veo que no está solo. Shawn viene con él a la mesa donde estoy con mi papá.

Estamos sentados con otras cinco personas que no conocemos, pero que ellos parecen conocerse bien. Son dos personas adultas, hombre y mujer, acompañado de un joven como de la edad de Cam que me ha sonreído más de lo normal, afortunadamente no se ha acercado a mí, quizá porque se encuentra atrapado entre los adultos y  esas dos chicas bastante guapas a quienes pille mirándome y murmurando entre ellas cuando creían que yo no les prestaba atención.

Cameron saluda a las personas adultas mientras Shawn le da la mano a mi papá, él lo saluda muy amablemente, no es un secreto que le agrade Shawn "el buen hijo de Manuel que no quiere quitarme a mi hija". Río.

Cameron se acerca a mi papá y este toma su pose de papá serio y estricto aunque hace un segundo estaba riendo con Shawn.  Yo esperaba que Shawn se dirigiera a saludar a las otras personas adultas de la mesa, creo que son sus tíos, en lugar de eso se acercó a mí, hubiese preferido que no lo hiciera aunque yo moría de ganas de tenerle cerca, por lo mismo fui muy torpe al saludarlo, solo le di la mano y un beso en la mejilla,  pero con ello basto para que sintiera el calor encenderme en colores hasta las orejas, intente disimularlo sonriendo a Cameron, el dúo de chicas no me quitaba los ojos de encima, no sería bueno que vieran el efecto que Shawn provoca en mí.

Cameron finalmente llegó a mí y toma asiento a mi lado, eso no ayudo en mucho, fue demasiado casual, como dos amigos que se reencuentran en el almuerzo del colegio y nada más. Cameron lo nota.

-Se le ha caído la baba por ti toda la noche – me susurra al oído y me roba una risita nerviosa.

Shawn nos mira de reojo mientras termina de saludar a los otros adultos, no toma asiento aunque mi papá insiste. Se disculpa y se aleja de la mesa. Quizá sea lo mejor, mantener las distancias por una noche tan importante como esta.

Aunque sigo sin cambiar de parecer por completo acerca de las bodas debo de reconocer que esta es de las más hermosas en las que he estado. La decoración es como un pequeño palacio de hielo, digno de un cuento de hadas, cristales, luces azules, los novios, la forma tan única en que Nash mira a Amelia quien luce preciosa, su vestido es hermoso. Me tienen maravillada.

Escucho que Cameron que dice algo pero no logro comprender.

-¿Qué? – pregunto pero él no me da respuesta.