En tus rodillas bebé. {2Jae}

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"En tus rodillas bebé." susurró el mayor en el oído el menor, haciendo que sus rodillas se flexionaran por inercia y tocaran el suelo mientras sus manos subían a su pantalón, extasiado por las palabras que el mayor había utilizado con tanta normalidad.

El calor enseguida subió por el cuerpo de JaeBum al ver al menor caer de rodillas frente a él. Agarrando sus pantalones fuertemente y con la mirada elevada. Notó como las manos del menor subían lentamente por su pantalón, llegando dudosas al botón de este, sin dejar de mirar al mayor.

"P-papi.... ¿P-puedo?" Habló el menor con voz temblorosa, su cuerpo reaccionaba sin permiso de su mente, deseando que las manos del mayor le tocaran, deseando sentir aquella mezcla de dolor y placer que su líder le había brindado ya una vez.

"Usa esa boquita tuya, bebé." Dijo el líder, mirando al menor con una sonrisa lujuriosa.

YoungJae desabrocho lentamente el pantalón del mayor, bajando este  junto con la ropa interior para dejar libre la, ya medio formada, erección del contrario. Agarró el miembro del mayor en su mano, lamiendo levemente la punta de este antes de meterlo en su boca.

Un suspiro de sorpresa salió de los labios de JaeBum al sentir la caliente cavidad del menor rodear su miembro, empezando a realizar un vaivén lento, succionando su erección de tanto en tanto. Una de sus manos subió a la cabeza del menor, agarrando su cabello y guiando los movimientos de este, haciéndolos más rápidos y profundos.

YoungJae se encontraba cada vez más excitado por la dureza del mayor, podía sentir el miembro de este rozar su garganta en cada movimiento. Retiró el miembro del mayor de su boca, pasando su lengua por toda su extensión, desde la base a la punta,   mordiendo levemente está mientras escuchaba los suspiros que escapaban de los labios de su líder.

"Eres jodidamente bueno bebé." Jadeo JaeBum, elevando el rostro del menor antes de agacharse y besar sus labios de forma ruda, metiendo su lengua en la cavidad del menor, encontrándose con la contraria para empezar una lucha lujuriosa.

Las manos de JaeBum recorrieron las piernas de YoungJae,  agarrando sus muslos con fuerza y elevando su cuerpo, haciendo que el menor rodeara sus piernas en su cadera. Un suspiro salió de los labios del vocalista principal, perdiéndose en los labios del líder, al sentir las  manos de este apretar su trasero.

El lujurioso beso fue cortado por la falta de aire, enseguida el mayor mordió el cuello del menor, dejando una notoria marca en la blanca piel de su niño. Una fila de besos y mordidas fue repartida por el cuello y mandíbula del menor. Mientras tanto,  las manos del mayor se metieron en la camiseta de YounJae, acariciando su piel mientras el menor suspiraba y gemia levemente.

En un momento, la camisa del menor fue arrancada de su cuerpo, mientras que el mayor recorría su piel con besos y lamidas, llegando a sus pezones y comenzando a jugar con ellos, logrando que la excitación del menor subiera.

"P-papi... Quiero senirte dentro, q-quiero que me la metas ya." Pidió el menor excitado,  elevando las manos hasta el cabello del mayor, que seguía mordisqueando y lamiendo sus pezones, logrando que pequeñas descargas de placer se mezclaran con el calor de las manos de su líder sobre su piel, calentando esta con cada roce.

Aquellas palabras enloquecieron a JaeBum, saber que el joven Sunshine del grupo tenía aquel lado lujurioso, calentaba su cuerpo y lograba que su perversa mente imaginara mil cosas que hacerle al menor. Se apartó del cuerpo de menor, terminando de quitar su ropa mientras que el menor hacía lo mismo. YoungJae apoyó sus manos en la pared, llevando una de estás a su entrada y mirando a su líder extasiado.

"N-no aguantó más.... Metelo ya papi." Volvió a pedir.

JaeBum no lo pensó dos veces, agarro con ambas manos la cintura del menor y metió su miembro de golpe, olvidándose por completo de usar el condón que llevaba en el bosillo de su pantalón, haciendo que el menor tuviera que apoyar su frente en a pared. El dolor enseguida invadió el cuerpo del menor, haciendo que varias lágrimas escaparan de sus ojos. Después de esperar unos pocos segundos, JaeBum comenzó a moverse lentamente en el interior de YoungJae, que trataba de controlar sus gemidos mientras mordía sus labios.

"Bebé, quiero escucharte." Susurró JaeBum en el oído del contrario, con la voz grave por la excitación de ver al menor suplicante por su toque y movimientos. YoungJae dejó de morder su labios ya doloridos, y dejó escapar sus gemidos, llenando así la habitación con su voz.

Poco a poco la velocidad de las embestidas del mayor aumentó, igual que su rudeza, llegando a sacar su miembro del interior de YoungJae para luego volver a meterlo violentamente. Las mejillas del menor estaban empapadas de lágrimas de dolor y placer, sentir al mayor en su interior estaba dejando su mente en blanco, sentía como su cuerpo perdía fuerza, teniéndose que sujetar más a la pared para no caer, el placer que le hacía sentir no se podía igualar a nada que el menor hubiera hecho el mismo con su cuerpo. Los gemidos de ambos vocalistas se mezclaban, creando una hermosa melodía para oídos de JaeBum, que apretó los glúteos del menor, aumentando una vez más la velocidad de sus embestidas.

Las rudas embestidas siguieron en aumento, haciendo al vocalista principal sentir como su bajo vientre se llenaba de pequeñas descargas eléctricas, indicando que pronto se correría. Y eso hizo, sin darle tiempo de avisar al mayor de corrió soltando un alto gemido, lo que logró que su entrada se dilatara y apretara el miembro del mayor, que se corrió pocos segundos después, llenando el interior del contrario.

"¿Estas cansado ya bebé? ¿O quieres más?" Habló el mayor, acercándose al oído del menor, haciendo que este se estremeciera. YoungJae por su parte se movió,  retirando el miembro del mayor de su entrada y rodeando el cuello de este con sus brazos.

"Esto es solo el principio papi, quiero más, mucho más de mi papi." Dijo el menor con una lujuriosa sonrisa. JaeBum sonrió agarrando su cintura y moviendo sus labios hacia el cuello del contrario.

"Te daré todo lo que quieras. Así que, en tus rodillas bebé." Respondió el mayor antes de morder su cuello.