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¡Ah duele! —queje mientras el intentaba meterlo.

La entrada es muy pequeña, no se como hacerlo— dijo nervioso.

¡Solo metelo ya! —queje hasta que al fin entro.

Listo, lamento haberte golpeado con la maleta.

—Descuida Daniel— sonrei sobando mi ojo.

Tu vuelo ya partirá— lo dijo con voz quebrada, en su mirar pude ver que sentía la necesidad de llorar, pero se hacía el fuerte— Algún día, iré por ti hermosa, lo prometo— beso mis manos y salió del aeropuerto.

Tenía el corazón partido perfectamente en dos pedazos, una mitad era nada más y nada menos que el amor de la pequeña Sun Hee, mis ojos aún seguían rojos, por nuestra despedida, le dije todo lo que sentía.

Y la otra mitad le pertenece a Daniel, no lo olvidaré pero tengo por hecho que debo superarlo.

El avión despegó y ya no había marcha atrás, apesar de ello no podía dejar de llorar, pensé que no dolería tanto, pensé que ya sería más fácil.

—————————————

El viaje concluyó, salí rápidamente del aeropuerto de Seúl, había un carro negro muy elegante esperandome.

''Buen día señorita, suba, debemos irnos lo más rápido posible''. —habló el chofer con una sonrisa amplia, me límite a sonreirle y subí, un chico de buena presencia y atractivo, estaba con nosotros.

Apesar de que traía un tapabocas que cubría casi todo su rostro, igual podía apreciar lo lindo que él era, alzó su mirada hacía mi y abrió sus ojos como platos grandes, pestaño muchas veces, como si lo que estuviera viendo fuese un sueño, y dudo que sea así, porque. . Me estaba viendo a mí.

¿_-____?—se atrevió hablar, con la voz algo quebrada.

¡¿Cómo sabes mi nombre?!—fruncí el ceño algo nerviosa.

Se acercó lo mas que pudo a mi, quito su capucha tanto como su tapabocas, froto su cabello haciendo que este quedara totalmente despeinado.

Dime que aún me recuerdas. . —sus ojos, mostraban algo familiar en el.

No puede ser. . Tú. . —cubrí mi boca con ambas manos para no gritar de la emoción— Jung. . ¿Jungkook?

Me abrazó dejándome casi sin oxígeno, pensé que jamás nos volveríamos a encontrar.
Nos conocíamos desde los 4 años, eramos inseparables, fue mi mejor amigo, y mi amor platónico cuando eramos unos mocosos, pero no todo es como el arcoíris. Sus padres eran grandes empresarios, y paraban de un lado a otro, nunca pasaban tiempo con el pequeño Jungkook hasta que decidieron llevar su empresa a otro nivel, y tuvieron que salir del país, y no volví a verlo, hasta ahora.

Pensé que no te volvería a ver jamás—su voz se hizo frágil—Hoyuelos te extrañe como no te lo imaginas—cuando eramos niños él solía llamarme así, siempre me decía lo mucho que adoraba mis hoyuelos y quería tenerlos.

Jungkookie. . Pero ya estamos juntos—trato de calmarlo, mientras acaricio suavemente su espalda.

Espera,¿Qué haces tú aquí?—dijimos al mismo tiempo— Esta bien, te contaré—sonreimos porque seguíamos haciendo eso—Hey. . Basta. . Habla tú— tomo mis manos, esperando una respuesta y el carro negro avanzó.

Tú sabes que desde pequeña quise ser una gran bailarina.

—Y rapera—completo mi oración.

Y tú un gran cantante —sonreí— Así que audicione para esta agencia, y aquí estoy—sonreí.

—¿Así me resumiras todos estos años que no he sabido de ti?—frunció su ceño.

Mi vida nunca fue tan interesante como la tuya Jungkook— hize mi puchero algo incomoda.

Mi vida era interesante, porque estabas tú en ella—posó su mirada en mis ojos—También audicione aquí, ya soy un aprendiz—sonrió cerrando sus ojos.

—Oye.  . Jeon Jung Kook. . Ya no te alejaras de mi, ¿Cierto?—dije con poca voz.

—Claro que no niña, estaremos más juntos que nunca, y para celebrar nuestro reencuentro, te parece si. . ¿Vamos a una fiesta?

—¿Fiesta? No debo concentrarme en lo que realmente importa tonto, mañana empieza el entrenamiento, y quiero descansar.

Hey. .  También yo, no eres la única, vamos solo será un rato—posó su mirada en mi mientras hizo un lindo puchero.

—Ahhh. . Maldita rata esta bien.

—¿Cómo me llamaste niña?

— R A T A.

—Ya verás hoyuelos— comenzó hacerme cosquillas en las costillas.

¡Por favor para!—traté de quitar sus manos a carcajadas pero era inútil.

Disculpen— toció el chofer— No es por incomodarlos, pero hemos llegado.

Todo era como imaginé, el lugar se veía muy refinado, y al tan solo estar afuera de la agencia, era tan. . Perfecto.

Y así es Big Hit—sonrió de lado a lado— Sé que te sentirás perfecta aquí niña.

—Lo haré porque estás conmigo.

Jungkook bajo todas mis cosas, me enseñó las instalaciones del lugar, las cosas que debía y no debía hacer, me dio algunos consejos y que sobretodo, siempre confíe en mi misma, en todo lo que haga.

No se donde están los muchachos sabes. .

—¿Eh? ¿Quiénes?— puse mi voz en un tono de curiosidad.

—Mis amigos, te caerán genial, ya verás—guiño el ojo—Aunque los veremos más tarde.

-La mejor apuesta. -TH y Tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora