•¡Él nunca fue, ni será!•

129 13 2
                                    

—JoungJae... Jong..Dae– Repetía su nombre como un completo idiota. Era extraño.

Ya habían pasado unas horas en las que llegue a casa. Como siempre, nunca tengo la oportunidad de cenar bien ya que ahí empiezan los insultos y lo demás a decir.

—Xiumin, ¿Cuando harás las cosas bien?–

—¿Que hice ahora?– fruncí el ceño.

—¡Eso, nunca haces nada!– alsó la voz, ya era un poco molesto para mis oídos.

—¿Algun día me darás unas explicación de todo esto?– Pregunté mientras jugaba con la comida.

—¿Que te puedo decir? Que eres un inútil. Hay ya lo has echado a perder todo, iré a acostarme un rato.– Se levantó de la mesa.

—Creo que te hace falta.– susurré.
—Creo que a ti te hace falta muchas cosas.– dijo dandole un cantazo a la mesa.

—Amor.– susurré

—¿Que has dicho?– me miró con molestia.

—¡Nada, vete! Tu cama te espera, creo que te entiendes mejor con ella.–

—Que desagradable, MinSeok.– me miró con desprecio para luego retirarse.

¿Já, que más? La vida quiere darme duro, pero la pregunta es ¿porque?.
Me levanté de la mesa para tirar todo al suelo, solo salí corriendo a mi habitación para comenzar a golpear las paredes. Me sentía una basura. No tengo nada, sólo soy yo contra todo.

—MinSeok, despierta.– Escuché la voz de mi madre para darme cuenta de que estaba en el patio trasero. ¿Como llegué? No lo sabia —Despierta, vas para la escuela.–

—Dejame en paz, además creo que es tarde.– dije con un tono ronco.

—No me importa tu tardanza, iras, punto.– ordenó.

—¿Desde cuando te preocupa de que vaya a la escuela?– me cruzé de brazos.

—Solo no quiero verte.–

—Te aguantas o tu te largas porque de aquí no me muevo.– dije todo un niño malcriado.

—¡Minseok, no quiero verte! ¡Gracias a ti, tu padre nos ha abandonado!– gritó.

—Eso paso hace...1..2..3..hace 5 días.– rodé los ojos.

—Ya vete.– dijo con un tono molesto al igual un poco quebrada, solo me levanté para irme como me lo había pedido.

—Me voy y no porque me lo pides, es para no escucharte más.–

Me encaminé a la casa para ir a la cocina, vi las pastillas de mamá. Era para la depresión, ya que yo las necesito más que ella tome el pote de pastillas prestado.
Salí de allí para llegar a la escuela.

—¡MinSeok!– gritó desde el otro lado —Pensé que no vendrías, ¿tu mamita no te quería ya en la casa?– hizo un puchero burlón.

—Yoongi, no estoy para tu estupideses, para eso esta el circo.– le miré de arriba a abajo para luego mirarlo con una sonrisa sarcastica con el ceño en alto.

—Ja, que gracioso.– dijo con el mismo sarcasmo. —Vamos solo bromeo o lo has tomado personal porque todos te dicen la verdad?- reí burlón.

¿Mi Cura Correcta? «Xiuhun» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora