¿Mi Cura Correcta? «Xiuhun»

•8•

—¿porque me miras así?–

—¿Estabas despierto?– preguntó aun con su mirada en mi

—Sentia tu mirada, ok?–

—Ya te dije, eres lindo MinSeok–
Susurró, se levanto y se dirijio al baño.—Tienes un sepillo nuevo–

—No sabias que me quedaria– fruncí el ceño

—No pero tengo mis repuestos, ¡solo agradece mocoso!–

—Gracias– dije rapidamente, luego rodé los ojos.

—Tu mamá debe estar preocupada, no cres?–

—Sehun, ni lo pienses– rió.

—¿Que quieres?– preguntó mientras salia de baño para dirijirse a mi.

—¿A que te refieres?– agarro mi mentón para hacercarnos.

—Cachorro, desayuno– dijo un poco obvio

Ok, va a ver una violacion aqui.

—Bien– voltee mi cabeza evitando contacto visual con él.

—Aqui no será– añadió

—¿Por? No gastarias por mi–

—¡aish! Solo vistete, pareces nena– hizo una mueca.

—¿Se te olvida que no traje ropa?–

—Esta lavandose, te presto otro par–

—Pareceré maestro– frunció el ceño.

—Sabes que no visto como uno–

—Bien, solo pasame la ropa– sonrió, lanzo la ropa a mis brazos, cuando lo obtuve me adentre al baño para poder cambiarme.

Esto es un error.

Yo «estudiante»
Él «maestro»

¿Cómo puedo estar aqui? ¿Cómo pude dormir con él? ¿Que estoy haciendo?
Espera, ¿Que hace aquí?

Terminé de cambiarme, salí y solo pude preguntar...

—¿Que haces aqui?– Frunció el ceño mientras me obserbaba extraño. —¿No deberías estar dando clases?–

—Te doy clases solo a ti, mocoso.–

—Aish, ni me lo recuerdes.–

—Mientras tu actitud sea la misma, estarás conmigo por un buen tiempo.– agarró sus llaves para salir de la habitación.

—Oye, esperame– peiné rapidamente mi cabello y fuí tras de él.
Nos montamos en el auto, el silencio estaba presente así que decidí encender la radio para escuchar cualquier cosa que no tenga que ver con él.

Miraba cada cosa que venía de afuera, yo con mi mente bacía. Era desesperante, no decia nada, le miré pero aun así me ignorava.
¡Dios, di algo!
¿Porque no lo haces tu Minseok?
No tengo nada para decir, solo necesito insultar a alguien pero no quiero hacerlo con él.
Pienso que no lo merece. Correccion merece unas buenas bofetadas.
Es un idiota, quiero que ya acabe este día y despertar en mi habitación sin nadie a quien desee ve.

—Eh, Minseok.– le miré.

—¿Eh? Dime.–

—Ya hemos llegado.– Apagó el auto, se bajó al igual que yo.

—¿Dónde estamos?– pregunté mirando a mi alrededor.

—En mi cafeteria favorita.– lo observé extrañado —solo entra, niño.– asentí.