Capitulo 8: ''Sentimientos''

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27 de Octubre:

La vida es trágica. Jongin no llamó. Creo que me odia. Tal vez ChanYeol tenía razón: si me hubiera querido de verdad, me habría dado una oportunidad. Una parte de mí quiere llamarlo, pero tengo miedo. Me colgaría el teléfono. Supongo que me asusta enfrentarlo. Ya sé, ya sé. Estoy actuando como un idiota. Después de todo, sólo hemos salido unas pocas veces. Pero eso no importa. Todavía tengo la sensación de que hay un inmenso vacío en mi ser. Lo veía todos los días y hablaba por teléfono casi todas las noches. Lo echo mucho de menos. Y todavía sigo furiooso con ChanYeol. Ojalá yo fuera una persona mejor, pero no lo soy. Aunque, si Channie no me hubiera convencido de que le confesara toda la verdad, Kai todavía seria mi novio. Lo curioso es que mis padres quedaron tan asombrados por las maravillas que todos hablaron de mí en la exhibición, que me han levantado la pena. Hasta me permiten usar el auto los fines de semana. Lástima que ya no tengo a dónde ir.


SeHun cerró el diario y miró el teléfono silencioso. Por milésima vez tomó el auricular, dudó, y lo volvió a su sitio. ¿Qué sentido tenía? Kai no quería hablar con él. Habían pasado dos semanas desde la ruptura. Las semanas más eternas y desgraciadas de toda su vida. No podía comer, no podía dormir, no lograba concentrarse en su tarea. En resumen, no podía hacer otra cosa que no fuera deprimirse y rogar para que sonara el maldito teléfono.

De pronto, sonó. Se quedó mirándolo como una estúpida durante un momento y luego se abalanzó hacia el aparato, con la esperanza de que fuera Kai.

— Hola. — Se oyó el ―clic característico de cuando cortan la comunicación a propósito. — ¡Caramba! — protestó —. Seguro que era número equivocado.

Se levantó de la cama, se puso los zapatos y tomó su mochila. Tenía un examen de francés; de todas maneras, le importaba un rábano si lo aprobaba o no.

La escuela fue un plomo total. Las horas no pasaban nunca. Gracias a sus excelentes hábitos de estudio, con dar una simple lectura a las cosas logró que sus calificaciones no bajaran demasiado. Cuando sonó el timbre de salida, SeHun entregó su hoja de examen y Salió del aula sin perder tiempo. Baekhyun se encontró con él en el pasillo.

— Hola — la saludó con una amplia sonrisa — ¿Dónde has estado últimamente?

— Donde siempre — respondió SeHun —. Trabajando en el hogar y estudiando. ¿Y tú? — Lo último que le faltaba era un interrogatorio de Baekhyun. Otra curiosidad: pensar que un par de meses atrás habría hecho arder las líneas telefónicas contándole todos sus problemas a su amigo. Pero, por alguna razón, no lograba confiar en nadie lo sucedido con Kai. Excepto a ChanYeol, claro. Pero sólo porque él era el responsable de todo y bien se merecía aguantarlo llorando y protestando.

Baekhyun lo acompaño por el pasillo, rumbo a los armarios.

— Oh, lo de siempre. Las prácticas en el campo de deportes y el colegio, Ah, también he estado saliendo con Zitao, por supuesto.

— Qué bien. — Para ser honesto, le habría dado lo mismo que Baekhyun saliera con Zitao o con Freddy Krueger. Sonrió de mala gana al imaginar el cuadro. Pensándolo bien, habrían hecho buena pareja. Zitao es un chico maravilloso.

— ¿Todavía sales con Kim Jongin? — preguntó Baekhyun, tratando de aparentar indiferencia.

Pero a SeHun no lo engañó ni un segundo. Sabía qué significaba ese tono.

— ¿Por qué lo preguntas? ¿Cómo sabes su nombre real? 

Baekhyun se encogió de hombros.

No me olvides -[Chanhun/Kaihun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora