Karaoke

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  Todos los sabados me presento en Nichia Gakuin para estudiar japonés. Es algo rutinario en mi vida que antes si bien odiaba, ahora agradezco. Quizá se me presente la oportunidad de abandonar este horrible país. Irme a Japón siempre fue mi sueño. No hay nada que me haga querer quedarme en este infierno...
  Para un sábado, después de clases,  se programó un evento que si bien es llamado Karaoke, es mas un evento de esos, frikis, donde hay muchos stands vendiendo articulos extraños y de cultura japonesa. Lo unico de karaoke que tiene, es el escenario en el que solo suben grupos de gente (Estudiantes de Nichia) a intentar bailar K-Pop.

  Esto, sumado a la alta concentración de gente que nunca cambia, me provocó una sensación de desagrado

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  Esto, sumado a la alta concentración de gente que nunca cambia, me provocó una sensación de desagrado. Respondí con un rotundo no cuando mis amigos me preguntaban si me quedaría al evento de la tarde, puesto que no queria quedarme y pensaba volver a mi casa una vez acaben las clases de japonés.
  Una vez en mi casa, encuentro a mis padres preparados para salir. Al verme me exigen que vaya subiendo al auto porque llegabamos atrazados. Una vez estando dentro del auto en movimiento, pregunto con indiferencia que a donde ibamos. A lo que me dan una respuesta que no me esperaba y deja mis ojos como dos platos de ceramica. "Al karaoke".

  Llegamos y encuentro en el fondo de todo a mi grupo de amigos. Traté de escaparme de ellos en un comienzo porque ya les habia dicho repetidas veces que no podia quedarme al Karaoke. La incomodidad y la incertidumbre me devoraban la cabeza y al final, bastante petrificado me acerque a mis amigos en lo que en respuesta a mi preocupado caminar me recibieron cálidamente con abrazos y sonrisas.
  Estuvimos largas horas sentados en el piso, hasta que cayó el sol aproximadamente a las 7:00 p.m y se empezaron a ir uno tras otro. Solo quedabamos unos cuantos entre los que estaban, Yama (Chico de 17 años) y  Suga (Chica de 13).
  Tres compañeras de clase de Suga se nos acercaron e intentaron "socializar" con Yama y conmigo. Yo inconsciente de lo que tramaban, por mi ignorante mente, acabé prestandoles atención. De todas formas el plan no se les prolongó mucho. Mis padres estaban ahi y en un momento me llamaron. Era hora de irse.
  Asi me despedí de todas pensando en que nunca mas volvería a saber nada de ellas.

 

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