Capítulo 3: El Salvador Atacado.

2.3K 169 22
                                    

Los guardias se detuvieron Justo delante de ti, con los brazos cruzados e imponentes... sí, Justo como lo hacen los guardias, es su trabajo después de todo, intimidar.

__: N...No es lo que... parece... — Dijiste asustada.

Guardias: ... — No decían nada, pero parecían enojados, son guardias.

__: M-Me llamo ____. ¡Encantada! Mi signo zodiacal es cancer, tengo 24 años, me gustan mucho las cosas lindas, más bien son mi debilidad. No puedo evitar querer abrazar algo pequeño y lindo cuando lo tengo delante mío, pero no es como si sea una necesidad de vida o muerte, es más bien como un impulso... — Dabas un sigiloso paso hacia atrás mientras los mirabas a los ojos.

Guardias: ... — Seguían sin decir nada, pero... ¿Algo menos enojados?

__: Me gusta el chocolate, más bien cundo estoy en mis días debo de comer una tonelada de ellos, aunque eso no es algo que deba decírselo a unos machotes como lo son ambos, pero ya lo dije, ¡Ups!

Guardias: ... — ¿Lucían extrañados? No entendían nada de lo que decías.

__: Y.. Bueno... — "¡Esta es la mía!"

Te giraste rápidamente al ver que los habías confundido con tu oratoria, para poder correr y escapar de aquella situación, con un poco de suerte algún chico guapo te podría ocultar de la misma manera que pasó con aquella chica.

Pero al girar todo tu cuerpo y dar un paso con velocidad, chocaste contra un muro de carne llamado "Otro segurata" que apareció Justo detrás de ti...

"¡Era una huida perfecta!
¡DIABLOS!"


Segurata 3: A donde cree que va, señorita.

__: P-Pues... ¿Al baño? — Te pusiste ligeramente nerviosa.

S3: ... — Alzaba una ceja, este sí que lucía enojado.

__: Yo solo me estaba presentando a estos caballeros de enfrente mío y... Les estaba diciendo que el chocolate va muy bien cuando te sientes triste por que secreta serotonina cuando lo comes, que es el principal culpable de crear la sensación de felicidad en el cue-

S3: Con ellos funcionó, pero conmigo no lo hará.

__: ¿Fu-Funcionar? ¿El que? — Te hacías la inocente.

S3: Acompáñeme. — Se disponía a sujetarte del brazo.

__: T-Tranquilo, yo puedo acompañarle sin necesidad de que me toque. — Diste un paso hacia atrás.

No es solo el hecho de que un musculoso y desconocido hombre quiera sujetar tu brazo con algo de violencia ya que es su trabajo, si no que también sentías algo de miedo hacia aquella interacción... Te sentías pequeña de estatura... indefensa.

S2: Tiene razón, acompáñenos jovencita. — Reaccionaron.

__: Señorita, por favor. — Bromeabas.

S1: Usted se ve como una niña pequeña para nosotros, compréndanos. Así que haga caso a sus mayores. — Sonreía.

__: Y me hacen sentir como tal...


No temas, yo te protegeré. (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora