Stranger House !KOOKGI

01

Un Extraño en la puerta

—YoonGi, nada de lo que digas me hará cambiar de parecer, solo es un mes ¿si? Solo te pido que soportes un niñero un mes y después de eso ya no le volverás a ver la cara, te lo aseguro. — La señora Min miraba a su hijo con impaciencia quien se encontraba sentado arriba de su maleta como un claro "no te irás de aquí sin mi... o al menos, déjame solo sin niñero".

— Bueno, un mes pasa volando y aunque ahora mismo estoy enojado contigo por no llevarme a Japón. No puedo entender porque no me puedes dejar solo en casa, no voy a prenderle fuego.— Dio un salto bajando de la maleta y de la cama dejando a su madre seguir empacando "Demasiada ropa para un mes" pensó.

— ¿No puedes entenderlo? Te recuerdo que hace un par de semanas alguien olvidó cerrar la manija de gas y estuvimos a nada de visitar al hospital y tú el panteón.— YoonGi se alzó de hombros. — O cuando no quisiste llamar a los bomberos para bajar a la gata del árbol y casi caes junto con ella de cabeza al pavimento. — Min rascó su cabeza haciendo una mueca al recordar aquel desagradable suceso. — Y todo eso a pasado en este año. Amor, sé que eres mayor, que quince años ya es ser todo un adulto para ti, pero debes de reconocer que a veces eres un poco torpe para algunas cosas y me iré con pendiente si te dejo solo en casa. — Su madre se acercó para acariciarle la mejilla y el cabello. Con una media sonrisa y un beso en su frente.

— Bien, pero lo echaré de aquí si llega a provocarme o me trata como un crío. — Bufo aceptando todo lo anterior dicho por su madre y decidió abandonar la habitación de la Señora Min para después bajar a la sala de estar y mirar un poco de televisión.

Escuchando el parlaterio de su madre buscando sabe qué cosa en sabe qué lugar. Decidió mirar algo en la televisión frente al sillón de tres asientos, sumergido en el documental sobre la vida de los koalas.

— ¿Tragarse la mierda de su madre para sobrevivir? Más asqueroso que tener que convivir con un completo extraño, seguro. — Siguió cambiando los canales hasta llegar a "Un show más" el cual su madre todavía no le dejaba ver ¿pero qué más daba? No iba a estar en un mes.

El sonido repetitivo del timbre le hizo bufar, pero nunca tuvo motivos de pararse a ver quien era el idiota que los dejaría sin timbre. Miro expectante las escaleras esperando a que su mamá bajara y abriera la maldita puerta. Él podía hacerlo... pero no le apetecía pararse.

— ¡Mamá! ¡Tocan en la puerta! — Volvió a hacerse de oídos sordos, enfocando su concentración en la pantalla plana que reproducía a unos animales en una competencia de tiros de baloncesto.

— ¡Min YoonGi! ¡¿Cuantas veces te he dicho que no veas esa serie de drogas y animales asquerosos?! ¿Qué no oyes el timbre de la puerta? Ve a abrir de una maldita vez si no quieres estar castigado todo este mes. Y apaga ese televisor ¡Ya!— La cabeza de la Señora Min se asomaba en las escaleras señalando y maldiciendo a su hijo por ser un flojo de primera, y así quiere quedarse solo todo este mes.

Refunfuñando Min obedece a su madre y paga el televisor, tratando de no azotarlo contra la mesa de centro pues sabía que su madre pensaría que estaba enojado y además, él no quería tener ese asqueroso castigo.

Con pasos rápidos (y pocos) llegó en menos de cinco segundos a la puerta. En todo este lapso de tiempo el timbre seguía sonando sin parar "yo ya hubiera huido después del regaño de mi madre" pensó.
Girando el picaporte y tirandose hacia un lado, abre la puerta encontrándose con una figura esbelta, completamente de negro y con un brazo lleno de tatuajes. "Bien, mi madre me consiguió un guardaespaldas, no un niñero".