Happy Birthday sweetie ; ksj

OneShot

Mi cumpleaños era un día común y corriente para mí, estar lejos de casa en estas fechas siempre hacía que mi ánimo no estuviera muy bueno, pero hoy era algo diferente, no porque me sintiera mejor si no por quienes me rodeaban; había tenido un día divertido por decirlo menos, la buena compañía de amistades siempre hacen que uno se sienta mejor o que por último olvidase aquellos recuerdos desagradables y sentimientos feos, más aún cuando acababa de arreglarme para sentirme bella una vez más y salir de fiesta con mis amigas.

Hace unos días a penas habíamos decidido qué hacer la noche de mi cumpleaños, si bien había estado tranquilo el día, en aquellos momentos de soledad era cuando quería hundirme en mi cama, leer alguna historia increíble que escribían las chicas adolescentes, e incluso yo, porqué no admitirlo, amaba encerrarme en un mundo paralelo donde la suerte siempre está del lado de la protagonista y aquel sueño imposible se vuelve realidad, ese de conocer al chico famoso por el que te desvives día a día, por el que pasas horas revisando las actualizaciones de las redes sociales, e incluso las actualizaciones de las páginas que los siguen para saber más de él y seguir fantaseando, pero no, claro que no, eso sólo pasaba en las historias inventadas, nunca podría pasar en la vida real, claro que no. 

Ahora ahí estaba, enseñando mi identificación junto a mis amigas para entrar al club donde una fiesta de intercambio se realizaba, eran divertidas, Alice, mi mejor amiga, siempre me insistía en ir a ellas, aunque eran pocas veces las que aceptaba, hoy por ser especial me dejaba arrastrar nuevamente por ella. 

  — ¡Hey, Nat! Ven, ven, vamos a la barra por unos tragos, necesitas empezar el año disfrutando.— Sin más la pelirroja me arrastró con ella a la barra entregándome minutos después una bebida que por su color parecía más té que un trago. Joder, di un sorbo y rápidamente sentí el amargor quemar mi garganta, esta mierda si que estaba fuerte. No alcancé a quejarme con mi amiga antes de que ella me llevase ahora a la pista de baile. La música resonaba y las luces parpadeaban al ritmo de esta, el lugar estaba repleto, como a ella le gustaba.

Los minutos o quizás horas pasaron, y no me di cuenta cuando ya iba en el cuarto vaso de alcohol, ya pasaba como si nada por mi esófago. Gracias a los tragos me volvía mucho menos tímida, porque sí, una alumna de último año enfocada en los estudios y sin mucho tiempo se convertía finalmente en eso, una chica tímida y un tanto insegura, pero ahí estaba yo, moviendo mi cuerpo al compás de la música junto a mi grupo de amigas, mientras intercambiaba miradas con uno que otro chico que pasaba observando aquella escena sin saber si acercarse o no.

Entonces pasó lo que jamás esperé, alguien me abrazó por detrás susurrando mi nombre al oído haciendo que mi cuerpo completo se estremeciera, sin dudarlo me giré a ver y era él, joder, era él, el chico por el que estoy completamente babosa desde el primer año de mi carrera, estaba tomándome de la cintura y pegándose a mi cuerpo al compás de la canción que sonaba.

  — Natie, estás preciosa hoy...— Miraba directamente a mis ojos mientras decía aquello un poco más fuerte que lo normal, lo necesario para que le oyera entre todo el barullo, y no podía saber si estaba alucinando por culpa del quinto vaso o realmente era cierto aquello.— ... feliz cumpleaños.— y entonces, cuando dijo eso creí que iba a morir porque estaba a sólo centímetros de mi rostro, podía sentir su aliento golpeando el mío, pero entonces un frío húmedo cubrió mi espalda, un "oh, lo siento muchísimo" fue lo que me sacó de mi ensoñación.

  — ¡Mierda! ¡¿Por qué no te fijas por donde vas?!— Me giré a ver quién había arruinado mi conjunto de la noche, mi espalda estaba mojada con alcohol, lo que me faltaba, un imbécil había derramado parte de su trago en mi blusa y, por si fuera poco, interrumpido en el momento más esperado de los últimos cuatro malditos años.