Lo siento por todo, por nada, o por tan solo algunas cosas. La verdad es que nose que siento, no estoy segura ni de querer sentir, tengo miedo que si siento demasiado me derramaré cada vez que te vea y eso no es lo que quiero, no quiero demostrarte lo que llevo dentro.
Hoy he recibido tu mensaje, de tan solo dos palabras, el que me ha matado, se que desde este mediodía tu vida aun ha cambiado más de lo que te estaba cambiando y que no sabes lo que pasará, se que tu tienes miedo, pero no te preocupes, yo también lo tengo.
No se que pasara con nosotras, no quiero que nadie cambie, pero se que no podrá ser así, se que no te veré 5 días a la semana para darte un abrazo y sentirme en mi punto de confort, de paz, de seguridad, mi punto de felicidad.
No quiero ponerte mil textos por las redes sociales, he empezado unos cuantos la verdad, pero siento que entonces no sería nuestro, que lo vería demasiada gente para que fuera algo nuestro. Quería algo que pudieras llevar siempre contigo o que pudieras guardar fácilmente, aunque fuera en un cajón abandonado de tu habitación.
Quería algo material, aunque nosotras no seamos de las cosas materiales, esta vez quería algo totalmente y solamente nuestro, y creo que lo estoy consiguiendo.
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