Apocalipsis Zombie

cap.10 el fin

Hace ya cinco meses que no teniamos problemas en Alejandria, pero los zombies cada vez se hacían mas presentes alrededor del refugio, haci que para que no fueran un peligro constante para las familias de la comunidad, decidimos arastrarlos a una zona en donde no hubieran personas, el plan era que llevaramos un camión tocando la bocina y haci los zombies nos seguirían hasta el lugar. Yo y dos personas mas fuimos manejando en el camión mientras que Carl y Malcolm fueron en motocicleta.

Arrancamos, en ese momento senti algo extraño, no sabia bien que era, talves no era nada, se abrió el portón y enseguida nos encontramos con zombies, salimos en el camión y nos siguieron los zombies como un gato detrás de un ratón.Boom, boom, boom... sonaba la bocina del camión, mientras que los zombies nos seguían. Mientras seguimos se nos unian cada vez mas zombies. Llegamos al lugar acordado, era en un acantilado donde todos los zombies caerían. Mientras caian los zombies, de pronto se escucha una gran explosión que provenía de Alejandría por eso todos los zombies se dispersan y los lleva directo al lugar, se podía ver el humo a kilómetros. Rápidamente me subí al camión y me dirigí a Alejandría, esperaba lo peor; en ese momento estaba muy nervioso e impaciente por llegar a ver a mi familia pero dentro de mi sabia que mi familia estaría bien. Al momento de llegar a Alejandría me encontré con un gran incendio en una de las murallas, pero lo peor fue cuando me encontré con hombres ende-moniados queriendo matar a todas las personas que se encontraban en Alejandría rapidamente luchamos en contra de ellos, pero eran muchos y morian muchos de Alejandria. Alejandria estaba acabada lo único que me quedaba por hacer era encontrar a mi familia y rescatar al mayor numero de personas. Corrí por las calles sigilosamente y eliminando a los enemigos que me encontraba en el camino, de pronto un hombre me da un golpe en la cabeza con un palo, en ese momento saque mi arma y le di un tiro certero en la cabeza, no podía perder el tiempo tenia que encontrar a Jennifer y dejarlos a salvo. Llegue a mi casa.

-Jennifer, Jennifer.-dije.

Salio Jennifer debajo de la cama y me dio un fuerte abrazo, tome a mi hijo, Jennifer tomo provisiones y salimos de la casa. De un momento a otro entraron todos los zombies que estaban afuera de Alejandria, tenia que salir de la ciudad y salvar a mi familia, salí sigilosamente de mi casa matando zombies y hombres. Me siguieron muchas personas de la comunidad, afuera me esperaba Carl, Malcolm y Freddie, nos subimos al camión y nos encaminamos al refugio  mientras veíamos a nuestro hogar destruirse y derrumbarse algo que nos costo tanto verlo destruido y acabado. Caundo llegamos a el refugio no encontramos nada y nos encontramos con todo destruido y derrumbado, nos encontramos con un hombre sentado a la orilla del camino.

-¿Amigo que paso aquí?- le pregunte.

El hombre quedo en silencio y le pregunte nuevamente.

-nos invadieron, nos invadieron, murieron todos, murieron todos.- respondio el euforicamente.

-deben haber sido los mismos hombres que atacaron Alejandría.-dijo Malcolm.

-si yo creo. ¿Amigo sube vamos a un lugar seguro?-le dije.

En ese momento el hombre saco un arma, se la puso en la cabeza y se dio un tiro, nadie de todos los que estabamos presentes quedo sorprendido por lo que vimos. Decidimos irnos lo mas lejos de Alejandría y del refugio, comenzar de nuevo algo simple, llegamos a una casa en el campo que nos servirá para vivir un tiempo. Encontré en el sótano un alambre que lo ocupe para hacer una alambrada alrededor de todo el sector, ya por la noche comimos una sopa y establecimos turnos para hacer guardia, yo comencé con Carl.

-quien nos ataco Philip.- pregunto Carl.

-no lo se Carl, eran desconocidos.-le respondí.

Esa noche fue imposible dormir, pensábamos constantemente en las personas que perdimos pero principalmente en ellos que nos quitaron todo, siempre que lograbamos algo, alguien venia y lo destruía, al parecer es parte de la naturaleza del hombre. Al otro día  establecimos reglas y  deberes para cada uno, los hombres nos dedicamos a sembrar y cuidar la granja, y las mujeres se dedicaron a la casa  ese día salí a inspeccionar en el sector, estaba lleno de árboles, ríos y uno que otro zombie, pero el lugar era muy tranquilo para poder criar hijos, sembrar y  cosechar. Mientras caminaba me encontré con una laguna, decidí darme un chapuzón el, agua estaba muy refrescante y por fin encontre algo de paz y tranquilidad, hasta que de pronto llega Carl.

-Philip, aquí estas. Te estuve buscando por todos lados.-dijo Carl.

-¿que sucede?- le dije.

- llego un hombre, dice que te busca.- respondió el.

Rápidamente me vestí y fui de regreso a la casa. Ahí estaba el, el hombre que pensé que lo había perdido, el hombre que me vio nacer, mi padre.

-Padre, padre. No puede ser tu estas muerto.-le dije.

- no sobrevivi a la caída.- respondio el.

- pero y¿ lo zombies?- le pregunte.

-no me vieron me escondi debajo de un auto.- respondió el.

Al momento que ya vi que era real, me acerque y le di un gran abrazo. Le presente a mi hijo y a Jennifer le conté lo que había sucedido.

-Conozco a esos hombres, son malos y si quieres a tu familia y tus amigos no buscaran venganza. -dijo el.

-No lo hare, no lo hare.- le respondí.

Al día de hoy es de lo único que me arrepiento de no haber buscado venganza por lo que me quitaron, fui un cobarde pero eso me permitio ver a mi hijo crecer y ahora es un hombre, poder estar con mi padre y cuidarlo hasta el día de su muerte y poder proteger a Jennifer que sigue a mi lado; ademas pude crear un lugar tranquilo para vivir, sembrar y cosechar.